El debate empresarial: modificaciones puntuales o cambio integral del sistema
Si bien está dando vueltas desde hace años, la reforma laboral es uno de los debates más complejos que se vienen tras las elecciones presidenciales.
En este marco, una discusión divide a los empresarios: apostar por cambios puntuales o pelear por una modificación integral.
La primera opción apunta a bajar costos con la reducción de aportes patronales y mejorar la competitividad con nuevas formas de contratación.
La segunda incluye renovar convenios colectivos, reducir la conflictividad laboral y acotar la denominada “industria del juicio”.
Esto plantea Julián de Diego, cuyo estudio jurídico asesora a casi 60 cámaras empresarias de ambas posiciones en este debate. Para el especialista, hace falta “mantener los principios generales de protección del trabajador de la Ley de Contrato del Trabajo”, aunque urgen cambios.
Un punto tiene que ver con el costo laboral. “Argentina no es competitiva frente a otros países de la región. Sólo en la industria metalmecánica los costos duplican a los de Brasil y Colombia y triplican a los de México”, asegura.
Otro es la baja productividad. “En el cordón industrial bonaeren
se, muchas empresas tienen 20 por ciento ausentismo. Esto obliga a las pymes a tener dotaciones de reemplazo con la complicidad de las obras sociales sindicales y de los profesionales. Se dan muchas licencias por enfermedad sin fundamento”, relata.
Para De Diego, también es un problema la conflictividad que plantean los gremios, que “no se compara con la incidencia de los sindicatos de la región, y eso también eleva los costos”. Es por esto que entidades como la Cámara de Industriales Metalúrgicos y Componentes de Córdoba proponen acotar la cantidad de delegados. “Hay empresas con 25 empleados y tres delegados. Se podría fijar un criterio de uno cada 25 trabajadores”, advierte su titular, Eduardo Borri.
Menor judicialización
La llamada “industria del juicio” es un reclamo insistente, aún cuando la última reforma al sistema de aseguradoras de riesgo del trabajo (ART) ayudó a reducir la conflictividad. Igual, las empresas reclaman profundidad.
“Se requiere un tratamiento serio de los embargos por parte de la Justicia y eliminar la ‘industria del juicio’. Las empresas necesitan previsibilidad en las indemnizaciones y claridad legislativa para evitar tanta interpretación de la ley derivada en la jurisprudencia”, explica Jorge Yapur, vicepresidente de la Cámara de Industriales de Alimentación de Córdoba (Adiac).
Al respecto, Daniel Urcia, director ejecutivo de la Asociación de Frigoríficos Industriales (Afic) agrega: “Hay casos con demandas de un millón de pesos que terminan arreglando por 10 mil. La reforma requiere un análisis integral de todas las organizaciones”.