La amenaza del Deutsche
El banco recibiría una multa que supone un síntoma de unas finanzas globales en crisis.
Cuáles
son las posibilidades de una nueva crisis mundial en vista de la amenaza de que el Departamento de Justicia de Estados Unidos multe al Deutsche Bank después de las elecciones norteamericanas de este 8 de noviembre? La situación que presentaría una eventual caída del Deutsche Bank presenta un panorama diferente del que se dio con la caída de Lehman Brothers en 2008, pero en cualquier caso es un panorama sombrío, preocupante.
Estructuralmente el Deutsche es distinto de lo que era Lehman al momento de su caída. A pesar de que el Deutsche es un banco débil que está altamente apalancado en relación con lo que es el estándar de los otros, y que tiene un esquema de negocios poco transparente, incluyendo activos opacos que no tienen precios de mercado, sus fuentes de financiamiento están más diversificadas que lo que ocurría en el caso de Lehman. Y en principio el Deutsche tiene acceso de emergencia a financiamiento del Banco Central Europeo.
Esta coyuntura nos enfrenta a una situación por demás interesante, que es ver qué rol tomaría el Gobierno alemán en el eventual caso en que evitar la quiebra del Deutsche dependa de un programa de salvataje. ¿Mantendría su filosofía de evitar intervenciones que alimenten un problema de “riesgo moral”, como viene manteniendo como bandera de la construcción de sistema político en Europa, posición que impuso con vehemencia en el caso de la crisis griega, país al que le impidieron reestructurar su deuda? ¿O en este caso su posición cambiaría en