“Soy un arqueólogo fotográfico”
El fotógrafo retratista de Buenos Aires prepara su muestra “Vidas íntimas”. Amor-odio por la ciudad y casa con historia.
Claudio
Larrea es un flâneur, un amante que recorre la ciudad con el ojo atento y la emoción dispuesta. Un cazador en busca de imágenes. Con su cámara fotográfica registra edificios, personas, situaciones y paisajes. Siempre encuentra algo que lo sorprende o conmueve.
“Mi papá era suboficial mayor de la marina y, además, hacía fotos para sumar dinero. Tenía una Retina Automática III, que siempre admiré y a la que no tenía acceso. Cuando tenía cinco o seis años me compraron una Kodak Fiesta, muy primaria, pero yo le tenía mucho cariño. Y cuando papá murió, a mis nueve años, mamá me dio aquella cámara tan querida y desde entonces no paré”, recuerda y agrega que de chico estudió pintura y piano y, después, historia del arte y periodismo.
En un pasado no tan lejano fue periodista y productor de imágenes. Hoy es un fotógrafo reconocido y un director de arte que deja su impronta en campañas publicitarias. De su ojo y su sensibilidad surgen imágenes bellísimas, como las que plasmó en “Arquitectura peronista, primera y segunda presidencia de Perón”, “Lobbies de Buenos Aires”, “El amante de Buenos Aires” o en la reciente y muy celebrada "República de Waires". “El título refiere a La República de Weimar. Ahí me puse más oscuro y expresionista. Me gusta mucho el expresionismo alemán, Fritz Lang, Murnau, August Sander”.
Actualmente prepara un libro de fotos sobre la película “Yo soy así, Tita de Buenos Aires”, de Teresa Costantini, y una nueva muestra, “Vidas íntimas”. Hace poco recibió el premio “Ventanas al futuro de la arquitectura al mérito 2016” que otorga el Centro de Arte y Comunicación (CAYC).
NOTICIAS: El periodismo fue la puerta de entrada para lo que vendría después.
Claudio Larrea: Sí, trabajé para muchos medios, hacía reportajes, me encantaba. Después entré en Playboy y empecé a hacer también producciones de moda y de desnudos, pero no sacaba fotos para la revista. Y una vez, Ricardo Merkel me enseñó a revelar. Después, le mostré esas fotos a Eduardo Grossman, un gran fotó- grafo, y le gustaron mucho. NOTICIAS: ¿Qué fotos eran? Larrea: Yo había viajado dos veces a Cuba por Playboy para cubrir el “Festival del bolero” como periodista y, además, saqué fotos para mí. Después fui a ver a una señora que manejaba una galería de fotografía, pero no fue muy amable. Me tiró abajo y por eso dejé la cámara durante diez años. NOTICIAS: ¿Y qué hizo? Larrea: Seguí trabajando como productor y me fue muy bien. Hacía las tapas de NOTICIAS, Caras, Rolling Stone, Cosmopolitan.
NOTICIAS: Después se convirtió en director de arte.
Larrea: Empezó a haber menos producciones, se pagaba menos. Entonces, le llevé mis trabajos al director publicitario Martín Lobo. Así entré en publicidad, y hoy sigo como director de arte. Me gusta mucho, puedo crear mundos preciosos. Y para el cierre de mi etapa como productor hice una muestra en el Recoleta, llamada “Vidas privadas”, con las producciones que había hecho en la era Menem, como Herminio Iglesias, Hebe de Bonafini y Susana Giménez, entre otros.
NOTICIAS: Y en un momento se fue a vivir a Barcelona.
Larrea: En febrero de 2001, con mi compañero, hoy mi marido, nos fuimos a vivir a Barcelona y nos quedamos diez años. Allí hice muchos comerciales para Francia, Italia, Inglaterra, Estados Unidos. Siempre como director de arte.
NOTICIAS: Además, hizo viajes fotográficos.
Larrea: En los noventa había fotografiado Nueva York y La Habana y estando en Espa-