“Le tengo un poco de temor a ser mamá”
La modelo y presentadora de Fox Sports habla sobre el lanzamiento de "Proyecto auras". Pasado de arquera y amor por los autos.
Es
presentadora, periodista, licenciada en relaciones institucionales, artista plástica y posee una tecnicatura en Marketing Digital. También fue arquera del seleccionado de hockey del "Alto Valle" de Río Negro, su provincia natal, y preseleccionada para el seleccionado junior argentino. Aunque la mayoría conoce a Carolina Di Nezio por ser la morocha impactante de las pasarelas y las publicidades gráficas, que actualmente cubre el detrás de escena de las carreras de la categoría Turismo Nacional, para la Televisión Pública, y por ser la belleza engalana la pantalla del canal Fox Sports contando las intimidades de las competencias de esa misma categoría automovilística.
La menor de tres hermanos llegó desde Cipolletti, su ciudad natal, cuando era muy joven. Vino a Buenos Aires para estudiar. También vivió en Estados Unidos y San Martín de los Andes, donde fue descubierta por el fotógrafo Gabriel Rocca cuando trabajaba como camarera. Rocca le sugirió que intentara probar suerte como modelo.
Hoy está recientemente casada con Fernando Hermida (40), con quién lleva seis años en pareja. Pasó sus vacaciones en Punta del Este, donde se prepara un 2017 en el que, además de continuar haciendo televisión, lanzará “Proyecto auras”, una plataforma digital cuyo fin será concientizar sobre el bienestar.
NOTICIAS: Su salto a lo mediático fue en el reality “SuperM 2002”, ¿qué recuerdos le quedan de esa primera incursión televisiva?
Carolina Di Nezio: Lo viví pésimo (Risas), en serio. Sucede que de chica era muy fundamentalista con todo y me enojaba fácilmente, sobre todos las injusticias. En el reality había muchas y a mí me costaba entender que eran parte del show televisivo. Quizá debería haberlo disfrutado, pero la realidad es que no lo disfru- té nada.
NOTICIAS: ¿Pero le abrió muchas puertas?
Di Nezio: Sí. De hecho seguí trabajando en la agencia de Ricardo Piñeiro y salían más cosas.
NOTICIAS: De chica fue una excelente arquera de hockey, ¿por qué lo abandonó?
Di Nezio: En mi casa siempre el estudio estuvo por encima de todo. Mi papá era científico del CONICET y, para él, el modelaje, el deporte y la televisión no eran estudio. Cuando fui preseleccionada para el seleccionado junior argentino, empecé a entrenar. Pero me vi obligada a dejarlo para terminar los estudios y seguir una carrera. Hoy tengo un título y una tecnicatura. Aunque en la vida hice de todo.
NOTICIAS: ¿Cómo fue que empezó a pintar y llegó a vivir un par de años de sus pinturas?
Di Nezio: Pinto y me encanta, es una manera de descargar, aunque no estoy pintando tanto. En realidad, cuando tenía 22 años, fui a vivir a Estados Unidos. Recién había terminado la facultad y tenía una crisis existencial. No sabía qué quería hacer con mi vida y empecé a pintar cuadros como una manera de descargar emociones. Tuve la suerte de agarrar una época en la que en Miami la gente compraba departamentos, los decoraba y los vendía decorados. Y me metí en ese curro. Empecé a conocer gente que hacía estos negocios y les hacía cuadros por encargo. Me fue muy bien. Así viví un tiempo entre Miami y Nueva York, que era donde funcionaba ese negocio. Pero después me quise volver a la Argentina porque mi papá se había enfermado y estaba mal.
NOTICIAS: ¿Cómo fue el salto del modelaje a la conducción televisiva?
Di Nezio: Cuando salí de “Súper M”, en 2002, enseguida empecé a trabajar en Fox sport. Ahí fue que me aleje un poco del modelaje para dedicarme más al deporte y a los autos.
NOTICIAS: ¿Costó que la acepte el público del automovilismo?
Di Nezio: Hay prejuicio. Era una modelo hablando de autos. Pero ese prejuicio se convierte en problema cuando uno se hace cargo y cree que las críticas son la realidad. Al principio me costaba superar el prejuicio y a todo el mundo tenía que ir diciéndole que había estudiado. Me esforzaba por demostrar que estaba capacitada para hacerlo. Los argentinos somos de encasillar a las personas, pero la realidad es que, a veces, no somos una sola cosa, sino que somos mu-