UN MEXICANO DOMADOR DE LAS PAMPAS
Cultiva el bajo perfil. Hay pocas fotos de él. Es mexicano, pero vive en un piso 40 en Columbus Circle, frente al Central Park de Nueva York. Dicen que le costó 40 millones de dólares. Pero a él le gusta venir cada dos meses a Buenos Aires y hacer negocios.
Se llama David Martínez, es un casi desconocido hasta en su país, pero en la Argentina se ha convertido en el mayor accionista del tercer grupo económico local, la nueva Telecom, dueña de Cablevisión. Sin embargo, se espera que descanse en el CEO de Clarín, Héctor Magnetto, para la gestión del gigante naciente. Es que su socio conoce más los negocios y la política de la Argentina. De todos modos tiene ejecutivos de confianza en el país: Mariano Ibáñez, actual mandamás de Telecom, y Sebastián Sánchez Sarmiento, que gestiona su portafolio en la Argentina.
Martínez es un hombre del mundo financiero. Experto en comprar acciones y títulos de deuda de empresas y países en crisis. Los valoriza y a veces los vuelve a vender. Llegó primero a la Argentina en 2006 para convertirse en socio minoritario de Clarín en Cablevisión. Tiene el 40% de la operadora de TV por cable.
En 2013, mientras sus socios peleaban con el kirchnerismo, el empresario mexicano quiso hacer su propio camino y negoció comprar la mayoría de Telecom Argentina a Telecom Italia. Aunque Fintech apoyó a la Argentina en su pelea con los fondos buitre, el gobierno de Cristina Kirchner no le creyó su independencia de Magnetto y nunca le aprobó el ingreso a la prestadora de servicios telefónicos.
Martínez también tiene inversiones en México, Venezuela, España y países de la periferia de la eurozona. Ha apostado por la infraestructura, la energía, las telecomunicaciones y la banca. En la Argentina de Mauricio Macri ha sido uno de los ganadores de la licitación para construir proyectos de energía renovable.