Tigre celebró el Día de la Virgen con su tradicional procesión náutica
Los festejos fueron encabezados por el intendente Julio Zamora y el flamante titular del Episcopado, monseñor Oscar Ojea, quien presidió la Santa Misa. Participaron más de 150 mil personas.
El
pasado 8 de diciembre el Municipio de Tigre homenajeó a la Virgen María con una celebración que convocó a más de 150 mil personas. Contó con la presencia del intendente Julio Zamora y y de monseñor Oscar Ojea, nuevo presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), quien presidió la Santa Misa y participó de la clásica procesión náutica sobre el río Luján.
"Este es un día que nos une a todos los que llevamos en el corazón la bandera celeste y blanca. El pueblo de Tigre es unido y solidario, tenemos que estar juntos y dejar de lado aquellas diferencias que a veces son insustanciales y recordar que nuestro norte debe ser el beneficio de todos los vecinos", destacó el intendente, acompañado por su esposa, la concejala Gisela Zamora.
Las actividades comenzaron con una procesión a pie que llevó a la Virgen desde la Parroquia Inmaculada Concepción hasta Paseo Victorica, donde tuvo lugar la Santa Misa. Desde allí partió la procesión náutica por el Río Luján, mientras miles de fieles agitaban pañuelos blancos como muestra de devoción.
"Hoy la Virgen buscó decirnos nuevamente que nos quiere y acompaña. Deseo que el Espíritu Santo descienda en cada uno, así como en sus familias y seres queridos y permanezca en los corazones de todos, alumbrándonos y guiándonos por el buen camino", dijo monseñor Ojea.
Finalmente, en un acto central marcado por la emotividad y las manifestaciones de fe, Ojea bendijo a los miles de presentes, para dar paso a un inolvidable cierre con fuegos artificiales junto al río.