Mostrar para contar
Hace unos días, un alto funcionario del gobierno nacional le preguntó con impaciencia a un periodista de la editorial que publica esta revista: “¿Ustedes qué ganan con mostrar esto?” En sus manos esgrimía un ejemplar de la primera edición de NOTICIAS del 2018, y se refería específicamente a la foto que la ilustraba, un retrato inusual del jefe de Gabinete, Marcos Peña, caminando en short de baño por las playas del balneario uruguayo de Guazuvirá, a mitad de camino entre Montevideo y Punta del Este. ¿Qué se gana con este periodismo que siempre, invariablemente, fastidia a los poderes de turno?
Detrás de las grandes discusiones ideológicas, económicas y de políticas de Estado que acaparan la agenda de los medios y de los voceros oficiales, hay historias personales, que revelan el lado íntimo de los protagonistas del poder (honestos o corruptos, valientes o cobardes, capaces o inútiles). La “ganancia” de mostrar eso es, según creemos los que hacemos, hicimos y haremos NOTICIAS, llegar a contar la trama auténtica de los tironeos humanos que mueven la rueda de la Historia. Son personas de carne y hueso -con pasiones, complejos, arrojo y mezquindades- las que hacen el día a día de la Argentina. Entenderlas en su versión no editada es nuestro modo de abarcar todo lo demás. Eso ganamos.
Pero también perdemos, y mucho, acaso demasiado. Esta semana se cumplen 21 años del crimen de José Luis Cabezas, el fotógrafo de NOTICIAS asesinado en Pinamar por hacer su trabajo. Él también descubría con su cámara a poderosos paseando en cuero por la arena. Y aunque el tsunami de las redes sociales amaga con llevarse puesto aquel fotoperiodismo artesanal, sus colegas de NOTICIAS siguen corriendo entre dunas y sombrillas, para capturar un momento de verdad visual entre tanto relato blindado.