“HABÍA SOBRES CON PLATA EN NEGRO”
AMaría Eugenia Vidal no la perdono”, dice Osvaldo Marasco. Sonrieron juntos para los afiches de la campaña 2015, cuando ella soñaba con ser gobernadora y él, intendente de Ituzaingó. Pero el armado de la lista local los distanció y ya no pudieron conservar en privado la alegría que mostraban en público.
“Pocos meses antes de las elecciones empecé a ver cosas que no me gustaban. Vidal es muy caprichosa y quería poner a un amigo suyo como candidato con DNI trucho, porque no lo habilitaba el domicilio”, recuerda Marasco en diálogo con NOTICIAS. Finalmente, perdió la intendencia. Y su lista de enojos con el PRO bonaerense creció: “Entregaban sobres con plata en negro para pagarles a los fiscales, y el uso de aportantes truchos empezó en el 2015”, dice sobre el escándalo que lo tiene como un protagonista. Su nombre aparece en el listado de aportantes privados de Cambiemos con una suma de 50.000 pesos, pero Marasco niega la contribución. Por eso, cuando vio que el caso pasaba de los medios a la Justicia, se presentó en el juzgado de Sebastián Casanello.
Su llegada al PRO es a través de Marcos Peña. Hace diez años, Marasco frecuentaba Los Pingüinos, el country de la familia Braun, los tíos del jefe de Gabinete. Fue Eduardo, el padrino de Peña, quien juntó a los dos políticos.