Miedo a que el dólar falte
Los escenarios de alerta que trazan algunos analistas sobre los vencimientos de deuda.
Cuando el directorio del Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó el crédito Stand By de alto acceso por US$ 50.000 millones para la Argentina, el pasado 20 de junio, una de las primeras ideas que transmitió a banqueros y referentes del mercado el entonces ministro de Finanzas, Luis Caputo, era que el financiamiento para llegar al fin del mandato de Mauricio Macri ya estaba asegurado. Como si existiera un temor no reconocido, precisamente, a no poder terminar el período de gobierno dentro de cierto orden económico. Ese temor subyacente es lo que se ha materializado en estos días, luego de que la crisis de la Lira turca terminara con la tregua cambiaria que había logrado Caputo en julio, ahora al frente del Banco Central. Tal vez, quien haya erizado los pelos de más de un funcionario fue el mediático economista Diego Giacomini, quien afirmó en un programa de televisión, en tono dramático, que “la Argentina tiene que hacer un ajuste de 6 puntos del PBI, si no, va a caer en default en 2020”. En rigor, Giacomini no habla sin fundamentos. Ya que si bien los economistas y analistas de mercado coinciden en que el 2018 cerrará sin mayores problemas, los dólares para atender servicios de la deuda de 2019 no están asegurados. De hecho, algunos creen que faltarían entre 17.000 y 20.000 millones de dólares y creen que el Gobierno está sobrando la situación. Un informe de la consultora Balanz elaborado en base a las conversaciones que tuvieron con clientes revela que existe una estimación alternativa que circula por los pasillos de fondos de cobertura de Estados Unidos donde se asume que Argentina “necesitará recaudar cerca de 19. 000 millones en los mercados de capitales durante el 2019, incluso teniendo en cuenta los 11,7 mil millones de dólares en desembolsos por parte del FMI”. Atento a ello, cuando el Presidente Macri viaje a Nueva York para participar el próximo 18 de septiembre de la Asamblea Anual de las Naciones Unidas, se tomará algunas horas para entrevistarse con banqueros e inversores. La reunión la están organizando el vicejefe de Gabinete, Gustavo Lopetegui, y el vicepresidente del Banco Central, Gustavo Cañonero, de fuertes contactos en el mundo de las mesas de dinero y operadores. El Presidente aspira a despejar las dudas que pueda tener esta gente sobre un default argentino. En el mercado se hace el siguiente cálculo:
Las necesidades de financiamiento del Estado para el año entrante alcanzan a 29.000 millones de dólares, a los cuales se les descuentan 9.000 millones de colocaciones intra-estado. A ello habría que agregarle unos 7.500 millones de déficit primario e intereses por 1.500 millones de dólares. Con ello, la cifra vuelve a los 29.000 millones. Aún contando el dinero fresco del FMI, Argentina va a tener que salir al mercado en 2019, y por ello tiene que reducir el costo, es decir, el riesgo país, que llegó al pico de 748 puntos, nivel considerado como de default.
Esta es la duda persistente, y el escenario requiere que el riesgo se vuelva a ubicar en niveles de 400 puntos como para que el costo de salir al mercado no sea tan oneroso.
Argentina va a tener que salir al mercado en 2019, y debe reducir el riesgo país, que llegó al pico de 748 puntos, nivel considerado de default.