Apellido ilustre
Una moto legendaria que regresó con la misma impronta pero cargada de tecnología.
En
el universo de las motos siempre existen modelos que dejan una huella marcada en la historia y se transforman en leyendas de las dos ruedas. Sin duda una de ellas es la Honda Africa Twin que a mediados de la década del ochenta ganó cuatro ediciones consecutivas de la carrera más dura del mundo, la París-Dakar. Hace un tiempo regresó con la misma impronta de aquella emblemática maquina pero cargada de toda la tecnología actual y un diseño que lleva el mismo ADN.
Uno de las novedades que trae es la caja automática de doble embrague denominada DCT que ayuda a circular con mayor comodidad en ciudad aunque a la vez permite intervenir mediante botones en el cambio de las marchas. En la práctica la moto arranca en punto muerto (N) y accionando un botón en el manillar derecho se engrana el cambio a la vez que ofrece diferentes modos de conducción, más confortable o deportivo. Sobre el manillar izquierdo se encuentran las teclas para subir y baja los cambios. En la práctica, la respuesta es inmediata para cualquiera de las seis marchas y resulta una delicia realizar reabajes y sentir las contra-explosiones del motor. Y los frenos? están ambos del lado derecho, el tradicional de pie y el de puño. Sobre el lado izquierdo hay una palanca que activa el freno de mano y que se encuentra más alejada de lo habitual para no accionarla por accidente. Dos aspectos se extrañan: uno es el cruise control para viajar más descansado en ruta y otro son los puños calefaccionados, algo que un buen para de guantes puede solucionar. El motor de dos cilindros y un litro eroga unos 95 caballos y empuja de manera contundente. Rápidamente se alcanzan los 200 km/h mientras que el aplomo de las suspensiones brinda una elevada cuota de confort y seguridad. Esta sensación se mantiene también en terrenos accidentados donde las suspensiones brindan una excelente respuesta. Cuando decidimos acelerar algo más de la cuenta en algún terreno irregular, como por ejemplo un empedrado, el control de tracción se activa prematuramente, algo que enseña a dosificar la potencia. El precio de poco más de 30.000 dolares es alto pero está acorde a lo que significa esta emblemática moto japonesa.