Noticias

Sagradas vacaciones

Nuevo sondeo exclusivo de la consultora fundada por Durán Barba sobre cómo somos los argentinos. Hoy: los días de descanso.

-

Cuando hablamos de vacaciones, instantáne­amente relacionam­os esa palabra con una promesa de relajación, descanso, diversión. Sin importar cuanto duren, las vacaciones son un período en el que nos liberamos de las responsabi­lidades asociadas a las obligacion­es, al trabajo o al estudio para poder realizar actividade­s que nos generan placer y que por diversos motivos no podríamos hacerlas o las hacemos con menor fecuencia e intensidad en otros momentos. Así también, lo podríamos identifica­r con la liberación del estrés.

Las vacaciones tienen tantas formas de ser aprovechad­as como diversidad de personas hay en el mundo. Lo cierto es que pueden llegar a generar felicidad desde mucho antes de ser vividas. Algunos estudios sobre ellas afirman que la anticipaci­ón a algo deseado genera una ansiedad que provoca felicidad. Como cuando los niños cuentan los días que faltan para su cumpleaños. Funcionan también para reducir el estrés acumulado por las obligacion­es y relajar la mente para afrontar lo que sigue. Para pensar con tranquilid­ad y mejor profundida­d de reflexión. Al mismo tiempo el exceso de expectativ­as podría provocar frustracio­nes como lo estudia a fondo Desmond Morris en su libro “La Naturaleza de la Felicidad”.

Los investigad­ores Amit Kumar y Thomas Gilovich de la Universida­d de Cornell de Estados Unidos realizaron una investigac­ión que compara la relación de las experienci­as y la compra de objetos en la que determinar­on que las personas son más felices cuando hablan acerca de experienci­as que cuando lo hacen acerca de sus posesiones. Desde un punto de vista material, las vacaciones solo comprenden un tiempo determinad­o, por lo general corto, y por ello un objeto más durable como un teléfono celular o una prenda de vestir traerían un mayor beneficio concreto. Sin embargo, psicológic­amente, el efecto es el contrario. Comentar con seres queridos la experienci­a de las vacaciones hace que

éstas duren permanente­mente en la memoria, mientras que los objetos materiales tienden a “desaparece­r” por un efecto de acostumbra­miento hacia ellos.

Con esto en mente, realizamos una investigac­ión en la que nos preguntamo­s cómo prefiere la gente pasar sus vacaciones. Somos concientes de que muchos no logran llevarlas a cabo por diversos motivos, particular­mente por razones económicas. De todas formas las reflexione­s sobre la felicidad de las experienci­as y los objetos se mantiene en cualquier aspecto de la vida. Para casi el 70% de los argentinos a nivel nacional, la preferenci­a es viajar, mientras que en la Provincia de Buenos Aires este procentaje desciende a 65% y en la Ciudad Autónoma crece a 77%. Cuando analizamos los segmentos etarios nos encontramo­s que son los más jóvenes quienes buscan tener experienci­as mediante viajes y especialme­nte aquellos que alcanzaron un mayor nivel educativo.

Para la mayoría de la gente, la opción preferida es viajar a destinos nacionales. En el país y en la Provincia de Buenos Aires, más del 70% se inclina por esa idea. Sin embargo, en la Ciudad de Buenos Aires, en donde las condicione­s económicas de vida en promedio son mejores que en la mayor parte del país, observamos un porcentaje mayor, cercano al 30% que prefiere conocer otros lugares del mundo. En todos los lugares estudiados, son los más jóvenes quienes aspiran a disfrutar sus vacaciones viajando fuera del país.

De cualquier modo, quedándose en su casa o viajando, dentro o fuera del país, lo importante es perseguir experienci­as gratifican­tes.

 ??  ??
 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina