Entretenimiento y patetismo
Susana Giménez. Entrevistas, humor y juegos. Domingos a las 22 por Telefe. Con Susana Giménez e invitados. Dirección: Eugenio Gorkin.
Enla primera llamada al público de este año, Susana descubre que el teléfono no tiene tono. Agradece el envío de una revista y al abrir el sobre que la contiene para mostrarla, está vacío. Se despide de dos invitados y debe dirigirse a su escritorio, pero ni ella ni ellos saben por dónde salir y se cruzan. Estos son sólo algunos de los muchos desaguisados que ocurrieron durante las cuatro emisiones iniciales de la nueva temporada de “SG”. El gran Fellini demostró en su entrañable película “Ginger y Fred” que la televisión en vivo, a veces, puede ser una coctelera donde entretenimiento y patetismo se mezclan en dosis parejas.
Después de 32 años de longevidad en la pantalla chica, su fiel audiencia conoce y festeja las consabidas distracciones, equívocos y torpezas de ese
fenómeno popular incandescente que es Susana. El problema radica en observarla desprotegida por su propia producción en detalles tan básicos como los antes mencionados. No basta con situarla en un lujoso y gigantesco decorado.
En otro orden, si bien rinde frutos en el rating, la incorporación del extenso y sensiblero segmento pregrabado denominado “Pequeños gigantes“–original de Televisa– donde grupos de niños, impulsados por sus atentos padres, hacen gala de aptitudes artísticas que van del canto a la acrobacia y del zapateo a la magia; lo cierto es que la conductora queda relegada a un incómodo segundo plano. Más cuando entre el jurado del certamen se encuentra la luminosa y carismática Tini Stoessel, que se posiciona como natural sucesora de la diva en el corazón de los espectadores. Luego, están las consabidas, eclécticas y previsibles entrevistas a figuras de diferentes calibres. Ya pasaron desde Luisana Lopilato, que se explayó sobre las bondades de su feliz vida hogareña en Canadá, hasta Vicky Xipolitakis que detalló la denuncia por violencia doméstica a su ex esposo. También asistimos a las preguntas supuestamente entrometidas del nieto de Carlos Monzón a Susana sobre el pasado amoroso junto a su abuelo; y el clásico humor acidulado de Ricardo Darín quien junto al “Chino”, su retoño, concurrieron a promocionar su película. Finalmente, es una pena que recién minutos antes de la medianoche del domingo, en el cierre del programa, se realicen los tradicionales llamados cuando esas comunicaciones siempre fueron el vínculo más fuerte y simpático con los incondicionales admiradores. Hasta ahora, los beneficiados con importantes sumas de dinero tuvieron tibias reacciones de agradecimiento. Quizás a esa hora estaban un poco dormidos.