Julio Le Park
El artista disfruta del merecido homenaje con las exhibiciones simultáneas que lo tienen como protagonista en Buenos Aires.
lettering sobre todo en proyectos editoriales, define el suyo como imperfecto. “Me gusta que las cosas no queden iguales ni simétricas, y que se note que hubo una mano tras esa construcción. Por eso empiezo dibujando en lápiz y después escaneo y sigo en la computadora”, relata. Este enorme abanico de posibilidades también generó en el mercado la posibilidad de enseñar esta técnica a distancia, como sucede con algunos fascículos coleccionables de diarios. “Es un arte al alcance, porque todos aprendimos a escribir en la escuela. Si después quiere hacerse más profesionalmente, es cuestión de observar y entender cómo se construye cada una de las letras”, apunta. Aunque lo fundamental, enfatiza, es nunca dejar de experimentar y dejarse llevar, volviendo un poco a la infancia y a esos primeros esbozos.
CADA CUAL A SU JUEGO. También han aumentado las ventas de productos específicos para la tarea y hay marcas clásicas de librería con líneas especiales, como Edding o Staedtler, que volvieron a estar de moda. Desde la tienda online de productos para manualidades Scrapbooklandia aseguran que hace alrededor de un año y medio comenzaron a aumentar las ventas de ítems para lettering. “Hay diversos factores que hacen que cada vez más personas se animen, como una libertad de poder realizarlo en cualquier lugar y con pocos elementos, ya que no requiere mucha inversión en materiales. También es algo muy estético y personal en tiempos en los que Instagram es la mayor vidriera”, opina Tamara Goldsztajn, creadora de la tienda. Para comenzar con este arte, desde el local recomiendan invertir en marcadores de micropluma, y una vez incorporada la técnica continuar con aquellos de punta fieltro tipo pincel.
E incluso los mismos diseñadores se han lanzado a crear sus productos para la venta. Es el caso de Natasha Leis Céspedes, creadora del emprendimiento Punta y Pincel, cuyo estilo “libre y relajado” se imprime en tazas y tazones con frases que vende a través de su cuenta de Instagram (@puntaypincel). “Creo que este crecimiento del lettering va de la mano de un cambio social. Hoy la gente está más interesada en lo saludable y espiritual, y este estilo representa esa libertad, porque es más orgánico, relajado y libre. Es una búsqueda más personal”, sintetiza la ilustradora.
"INVERTIR TIEMPO EN ALGO MANUAL QUE TE PERMITE EXPRESARTE CON LIBERTAD ES ALGO TERAPÉUTICO", EXPLICA LA PROFESORA CARLA GRACIANO.