Noticias

A las puertas del poder

- FOTOS: NÉSTOR GRASSI, TÉLAM Y CEDOC. RODIS RECALT rrecalt@perfil.com @rodisrecal­t

El presidente electo Alberto Fernández elige a los ministros (no a todos) y Cristina manda en el Congreso y la Justicia. Por James Neilson.

Mercedes con un aliado. Ignacio Mahiques era el candidato ideal, porque las familias Ustarroz y Mahiques son amigas, pero la opinión de Cristina tiene más peso.

Otro apuntado por CFK fue Martín Irurzun, el presidente de la Cámara Federal, a quien le endilga haber abierto la puerta para las prisiones preventiva­s a través de la llamada “doctrina Irurzun”, en la que sostenía que los ex funcionari­os podrían tener lazos dentro de la estructura del Estado que servirían para entorpecer las investigac­iones. Además de esto, Cristina también le recriminó que le había exigido al juez Sebastián Casanello que la indague en el marco de la causa conocida como La Ruta del Dinero K. La muestra más fuerte de su encono con Irurzun fue cuando se refirió a la oficina de escuchas y a la filtración de sus diálogos con el ex director de la AFI, Oscar Parrilli, de quien se descubrió que ella lo trataba de “pelotudo”. Cuando explicó que esa oficina de escuchas depende de la Cámara Federal, de la que Irurzun es presidente, Cristina resumió: “Irurzun te escucha y te mete preso”.

El tribunal que la escuchaba el lunes 2 no fue exento de dardos. Con destratos y chicanas los menospreci­ó al afirmar que la condena contra ella “ya estaba escrita”. Este fue un golpe a la credibilid­ad de los magistrado­s y a su imparciali­dad. Por ahora no hubo respuesta. Durante la audiencia, los jueces Jorge Gorini, Jorge Tassara y Rodrigo Giménez Uriburu solo la miraban. Sobre la acusación, se refería a ella como un “guión”, que se había escrito en otro lugar, en alusión al Poder Ejecutivo, y no dentro del ámbito del juicio. Los abogados presentes en la sala afirmaron a este medio que al fiscal Diego Luciani le temblaban las manos cuando tomaba nota.

MESAZA. Otros apuntados en la lista de Cristina son los integrante­s de lo que se llamó la “mesa judicial” del Gobierno saliente. La vicepresid­enta electa solo nombró al ministro de Justicia Germán Garavano, al secretario de Legal y Técnica Pablo Clusellas, se refirió al jefe de asesores del Presidente como “un tal Torello” (se llama José) y luego remató con “Angelici, el presidente de Boca”. “No tengo nada contra el presidente de Boca, soy de Gimnasia y Esgrima de La Plata, no soy de River, pero la verdad que tenía que llegar Mauricio Macri al Gobierno para que el presidente de Boca integrara una mesa judicial. Un escándalo. Una vergüenza. Apretando jueces, atropellad­o fiscales, celebrando sus reuniones en público y con crónicas periodísti­cas que contaban cómo, cuándo y dónde se reunían”, sostuvo en uno de los momentos más expresivos de su presentaci­ón. Se la vio disfrutar ese instante en el que dejaba en evidencia esa falla institucio­nal del macrismo.

LAWFARE. La mayor parte de la exposición de Cristina estuvo sosteni

“TENÍA QUE LLEGAR MACRI PARA QUE EL PRESIDENTE DE BOCA INTEGRARA UNA MESA JUDICIAL. UN ESCÁNDALO", AFIRMÓ CFK.

da en que era víctima de lo que se bautizó como lawfare, que traducido significa “guerra judicial” y que tendría como objetivos, en esta parte del mundo, a dirigentes latinoamer­icanos como ella, “Lula” Da Silva y Rafael Correa. Cuando explicó la matriz de esta metodologí­a, dijo que se iniciaban a través de denuncias de opositores al Gobierno con amplia cobertura mediática. En ese punto se refirió, sin nombrarla, a Margarita Stolbizer y luego a Elisa “Lilita” Carrió junto con Mariana Zuvic y Javier Iguacel, el ex director de Vialidad Nacional quien fue el que originó la causa por la que llegó a juicio oral.

En otro capítulo de su presentaci­ón apuntó contra los organismos que son querellant­es en la mayoría de las causas contra el kirchneris­mo, como la Oficina Anticorrup­ción y la Unidad de Informació­n Financiera (UIF). Allí le dedicó un capítulo a cada uno de sus titulares, por un lado a Laura Alonso, quien tuvo que conseguir que por decreto le permitan estar al frente de ese organismo por no ser abogada, y también a Mariano Federici, quien antes de desembarca­r en la UIF fue asesor legal del FMI. En este punto, Cristina afirmó que Federici había trabajado en el banco HSBC, acusado de lavado, pero ese fue un error. De todos modos eso no le elimina de su lista de la vendetta.

Otro organismo al que apuntó fue la AFI y a sus directores: Gustavo Arribas y Silvia Majdalani.

Si se mira la lista negra de Cristina, a excepción de algunos pocos nombres, no es muy distinta de la de “Lilita” Carrió, la diferencia entre una y la otra es que la primera se formó en el peronismo y la segunda en el radicalism­o y están enfrentada­s entre sí.

Esta segunda etapa de Cristina Kirchner en el gobierno la encuentra en plena guerra con el Poder Judicial. El mismo que le fue funcional durante su primera etapa en la presidenci­a y que luego la persiguió. ¿Qué hará ahora? ¿Eliminará solo a los infieles o intentará reformar el sistema? ¿Qué rol tendrá Alberto Fernández? La vicepresid­enta, en el final de su declaració­n, ya les dio a los jueces un adelanto de lo que piensa: “Preguntas tienen que contestar ustedes, no yo”.

 ??  ??
 ??  ?? La vicepresid­enta electa tuvo momentos en los que levantó el tono y apuntó contra los jueces del tribunal.
La vicepresid­enta electa tuvo momentos en los que levantó el tono y apuntó contra los jueces del tribunal.
 ??  ?? EN LA MIRA.
EN LA MIRA.
 ??  ?? TRANSICIÓN. Tras declarar, la primera aparición pública de CFK fue junto a Gabriela Michetti para hablar del traspaso de mando.
TRANSICIÓN. Tras declarar, la primera aparición pública de CFK fue junto a Gabriela Michetti para hablar del traspaso de mando.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina