Cuando Cocca debió romperomper su esquema por lesiones, Gustavo se puso el equipo al hombro y lo terminó gananganando. La Pantera, en el final, metió un zurdazo bárbaro...
Pasó asó algo mágico en el Cilindro. Dicen que Lisandro López entró a jugar y nadie lo vio. Que en los úlúltimosi didiez minutosi se puso en la piel de un pibe con la número 27 y fue a buscarlo a Bou. La Pantera necesitaba un socio, quedó claro. Jugó 80 minutos sin lograr conectarse con Lautaro Martínez, que vive del gol como él, y parecía que de la fiesta sólo iba a escuchar la música desde la calle. Pero la Pantera, solitario depredador, se colgó el equipo al hombro cuando no quedaba nada. Cuando de los 11 de Racing que salieron al campo y superaron claramente al Tomba en el primer tiempo sólo quedaban las ganas. A falta de seis minutos para consumarse la derrota, Bou fue guapo para girar rápido, escapar a la marca del primer defensor y encarar hasta conseguir un tiro de esquina. De ahí, de su propia ejecución al segundo palo, vino el doble cabezazo de Cuadro y el Pulpito González, quien la terminó ayer, GusCon el grito de primero tavo anotó su goleador del año y es el lo que va de Racing en Rafaecampeonato. del Indepenla, Newell’s (2), y ayer. diente, Lanús empujando para el empate parcial. Ahí se revolucionó el partido. El arquero Rey dejó de ser imbatible y en el primer minuto de descuento llegó la mejor versión de la Pantera, la recordadad del campeonato de 2014. Cuadrita lo asistió en medio de mil piernas, a Gustavo un rebote le acomodó la pelota para su zurda y el remate algo entró besando un ángulo. Gol. Golazo. Locura en el Cilindro. Piñata, brindis, mesa dulce. Lo rico vino todo junto y se saboreó mejor. Racing ganó. Bou reapareció con todo.
LOS GOLES DE LA PANTERA EN EL TORNEO