Puertas abiertas
Por tercera carrera en fila, Rossi debió defenderse sin poder atacar a sus rivales que iban adelante.
No hay caso, Matías Rossi no logra tener un auto rápido en el ritmo de carrera. Y da igual la categoría que sea. En las últimas carreras el Misil se tuvo que dedicar a cuidarse de que no lo pasaran, dejando a un lado (y muy lejos) la posibilidad de atacar. Ya le sucedió durante la segunda fecha de TC, que se disputó en Neuquén. Con su flamante Ford, el piloto de Del Viso marchaba segundo, a un mundo de Josito Di Palma y aguantando como podía a Guillermo Ortelli. Hasta que no dio más y el saltense lo superó (también lo pasó Juan Martín Trucco). Hace una semana, en la segunda cita del Top Race en Río Cuarto, otra vez tuvo que apelar a todas las maniobras de defensa posibles para contener a Agustín Canapino. ¿Y ayer? Sí, otra vez sopa. Con el Toyota Corolla hizo lo imposible para evitar que Facundo Ardusso lo superara con su Renault. Rossi finalmente fue tercero y charló con Olé. “Parece que este año estoy para defenderme nomás, ja”, contó Rossi en la sala de conferencias del Gálvez. “Me falta tener un auto rápido en el ritmo en las tres categorías. A una vuelta no está mal, porque de hecho me meto adelante en la clasificación. No sé si clasifico mejor de lo que debería, pero sí digo que hay potencial, pero falta ritmo”, agregó. Claro, hoy Rossi largará tercero y espera que Toyota le encuentre la vuelta a ese déficit que su Corolla tiene en las partes rápidas donde Urcera y Pernía le sacaron un mundo. “Si se logra mejorar en ese lugar estaré para pelear la carrera. Si no, se va a complicar. Me preocupa que sean 40 vueltas, porque en las 12 que tuvo la carrera clasificatoria me sacaron una recta de ventaja, así que será mucho peor”. Por las dudas, Rossi ya tiene listas las puertas para abrirlas de nuevo.
CLASIFIQUE MEJOR DEL POTENCIAL QUE TENIA. TRATE DE AGUANTAR SIN BARRER LA PISTA. SI EN LA FINAL SE DA TODO IGUAL, PUEDO MANTENER A ARDUSSO ATRAS LAS 40 VUELTAS”. Matías Rossi, tercero con el Toyota