ME EXTRAÑA...
A partir de su gol, la Panterita pelea por el puesto con Ábila.
El Rojo sufrió la partida de sus seleccionados y tuvo un laburado 1-1 con Tigre. Quedó lejos de Boca, aunque tiene un partido menos. ¿Le dará la nafta?
El 11 de diciembre del 2016 había sido su última vez. Por una lesión de Benedetto, Walter Bou debió ser titular en el Monumental y le fue bárbaro: marcó el 1-0, Boca terminó ganando el superclásico, agarró la cima y no la soltó nunca más. Sin embargo, a partir de ahí comenzaría una etapa oscura de la Panterita, ya que desde ese día no volvió a convertir... Sin embargo, 462 lunas después, se sacó la mufa: volvió a convertir y encima le dio el empate agónico a Boca en Tucumán.
Hasta no hace mucho, Guillermo siempre priorizó a Bou. Lo hizo apenas se lesionó Benedetto el año pasado, pero también cuando llegaron Tevez y sobre todo Wanchope Ábila. Aunque como sus rendimientos no fueron buenos, se tornó insostenible que pudiera seguir bancándolo en el equipo. Por eso, el que primero lo reemplazó fue Carlitos, parándose de centrodelantero, y después fue el turno del ex Huracán. Y así fue perdiendo mucho terreno, a tal punto que en los partidos anteriores al del domingo en Tucumán, la Panterita llegó a quedarse hasta afuera del banco...
Pero ahora, por lo menos en su cabeza, pareciera haber cambiado la mano. Haber convertido es, además de un dato muy bueno para los mellizos, un empuje anímico en su lucha por volver a ser tenido en cuenta como antes. Por ende, y mientras Benedetto se siga recuperando, Bou intentará recuperar su lugar. Eso sí, en gran parte, depende de él.