OLE EN RUSIA HOY NO PODEMOS PERDER
Hay que bajar la expectativa y buscar la clasificación. Si se puede ganar, bien. De última, empatar sirve...
LO QUE PLANTEA EL DT TIENE MÁS QUE VER CON SU IDEA.
Sampaoli está caminando por las paredes, por el techo, por los pasillos y hasta asomando la pelada por la cornisa. El nervioso estilo hiperquinético del entrenador de la Selección está llegando al clímax. Ya escribió, borró, corrigió, tiró al tacho, agarró otra hoja y volvió a escribir tantas veces el 11 de la Selección que hoy sale a la cancha a jugar su segundo partido en el Mundial de Rusia que en cualquier momento empieza a poner jugadores que no están en la lista.
Estratégicamente nos conviene bajar las expectativas. Tanto pensar en ganar el Mundial, que Messi gane el Mundial, se está volviendo una olla a presión que en cualquier momento explota. Argentina juega un partido que puede resultar definitivo para los números y también para el ánimo. Siempre la búsqueda de la victoria está asociada a la idea de ponerse esta camiseta y si ganamos seremos felices y comeremos perdices. Pero esta vez tenemos que tener en claro de antemano qué hacer si faltan 15 y el marcador está empatado: sería aconsejable meter el violín del ataque desmedido en una bolsa y tratar de no perder el partido con la dura Croacia.
No es joda lo que está en juego esta noche a las 21 en Nizhny Nóvgorod, las 15 de la Argentina. Si bien pase lo que pase no podemos clasificarnos ni tampoco quedar eliminados, el temor luego del empate inicial es que una derrota nos deje en manos de otros. Si Argentina empata llegará a la última fecha, contra Nigeria, dependiendo exclusivamente de Argentina. Pero si perdemos no sólo habrá que ganarle a Nigeria sino rezar para que nos ayuden los de afuera y empezar a hacer una serie de combinaciones y cuentas que por ahora es preferible evitar. Sepamos que hoy no podemos perder y listo.
El tema es qué hara Sampa. Adivinarlo es más difícil que engancharle la gambeta a Messi o entender un recitado en ruso. El profeta del ataque desmedido se pasó de rosca con la idea de confundir a Croacia y ya no sabemos si las certezas son tan ciertas ni si lo dudoso son dudas. Después de dar a entender que Pavón era la reencarnación de Caniggia y de ponerlo en la semana por el histórico Di María, al final el delantero que Boca blindó en 50 palos parece que lo mira desde el banco. En realidad está confirmado que será suplente pero decimos parece porque nunca se sabe cómo se levantará Sampa, ni si decidirá un cambio de último momento porque vio un movimiento croata a las cinco de la mañana que amerita la participación de otro jugador por la vinculación con la idea. O sea, Pavón no juega, pero Sampa dirá.
Más allá de este punto no menor, este equipo que planta Sampa para jugar con Croacia tiene bastante más que ver con su pensamiento futbolístico que el del triste debut. Mascherano y Biglia para jugar con Islandia, un equipo sin mucho interés por manejar la pelota, fue una apuesta equivocada. Sampa ahora arriesga al poner tres defensores y vamos a necesitar que Salvio y Acuña tengan mucha concentración para la marca y también se desprendan con decisión para lastimar en ataque.
La formación parece un típico 3-5-2 bi-
SAMPA YA MAREA: AHORA PARECE QUE NO VA PAVÓN.
lardiano, que se descompone en 5-3-2 cuando defendemos y 3-1-4-2 cuando atacamos. Por supuesto, estos sistemas en la libreta de Sampa tienen más números, más descomposiciones y más vinculaciones. Para no marear con tantas combinaciones resumimos en el 3-5-2 que Bilardo patentó en México 86. El lector ya se va dando una idea de lo complejo de la situación.
Por lo demás, este Mundial demuestra que nadie regala nada, que si dominás a un equipo se mete todo atrás sin ningún tipo de prejuicio, 4-4-2, 4-5-1 o 9-1-0. Ya todos aprendieron la viveza criolla de tirarse al piso, hacer tiempo, fingir dolores inaguantables y milagrosas sanaciones apenas las dos patas salen de la cancha para así pedir/exigir al pobre árbitro el reingreso inmediato. Los croatas cambiaron su sistema y pondrán un volante defensivo por un delantero para custodiar a Messi. Nadie come vidrio. Tratemos de no ser pioneros en la materia.
La idea es descomprimir, bajar tensiones. No sirve remachar sobre las tres finales porque además ya la salida de Rojo, Biglia y Di María es toda una movida. Necesitamos que Messi juegue para nosotros. Ni contra el fantasma de Maradona ni contra el portentoso andar de Cristiano por Rusia. Simplemente que juegue cerquita del área rival, se la pase como sólo él sabe al compañero mejor ubicado o frote la lámpara y nos haga gritar un gol.
La pasión y el aguante de la gente se van a sentir, en la cancha y en cada rincón de la Argentina cada vez que la Selección juega en un Mundial. Tengamos esperanza mientras en casa nos aprontamos a pasar un duro invierno, que nuestros muchachos disfruten en Rusia de un lindo veranito.