“QUE SAMPAOLI
Sampaoli comentó que los jugadores no se adaptaron al proyecto, que el proyecto fracasó. ¿Sentís que a ustedes les pasó eso?
Sergio Agüero escucha la pregunta con atención y de inmediato deja de mirar a su interlocutor. Se muerde los labios para tratar de contenerse, pero la bronca lo desborda por todos lados. Así como en la cancha no pudo eludir a los defensores de Croacia, esta vez tampoco logra gambetear su propia calentura. “Que diga lo que quiera”, dispara contra el DT. Como quien sabe que está al borde de decir una barbaridad, escapa de la zona mixta apretando el paso mientras todos permanecen absortos por su sorpresiva reacción.
Es cierto que hay que partir de una base: la pregunta para el Kun nació desde un concepto incompleto. En la conferencia, el DT no había hecho referencia a la palabra proyecto en términos abarcativos en cuanto a su ciclo, sino que la empleó para hacer alusión a la planificación del encuentro. “Me refiero al proyecto del partido”, aclaró luego. Sin embargo, la bomba ya se había activado. Y Agüero, con su respuesta, terminó de hacerla explotar.
En efecto, el delantero del Manchester City pudo haber optado por esquivar el tema, por escuchar bien la frase antes de hablar en caliente. Pero la furia de su frase, el tono, desnudaron, de mínima, un clima muy enrarecido con el DT, acaso una señal de cortocircuito interno. Que un jugador le conteste así a su entrenador en pleno Mundial no es normal. Hay algo más. Por más bronca que haya sentido Agüero al ser reemplazado durante el partido.
Dos horas después de que la frase del delantero, desde el entorno del DT contaron que el futbolista estuvo hablando con Sampaoli para aclarar el malentendido. “Todo se resolvió sin mayores inconvenientes”, fue el mensaje. Pero el cruce ya había ganado demasiado terreno y el Kun, muy activo en sus redes, tampoco eligió esa vía para aclarar la situación públicamente...
Agüero venía de marcar y de tener un rendimiento aceptable ante Islandia (11). Frente a Croacia tuvo poca participación. Y Sampa lo sacó. “Hicimos todo lo que pudimos. Y ahora vamos a tener que esperar el milagro”, dijo. A pesar de la frustración, el Kun no pierde las esperanzas: “Nos vamos con mucha tristeza y bronca, pero sabemos que todavía nos queda una chance. El martes deberemos hacer lo nuestro y ganar”.