NUNCA DESCANSA
Gallardo es, como dijo D’Onofrio, un director ejecutivo: volvió de festejar en Santiago y se quedó a dormir en el Camp para así ver a la Reserva. Secretos de una gestión exitosa.
El fútbol podrá tener su triple G patentada. Pero Marcelo Gallardo adoptó como metodología de trabajo una propia en el que el orden de las consonantes sí altera el producto. Gestionar para, luego, ganar y gustar. El entrenador de River ha creído -y cree- en ese concepto. Por eso cada vez que estuvo en hipotética duda su continuidad él ha insistido tanto con la necesidad de alinear energías dentro del club para mantener la vara en alto. Y, si es posible, subirla un poco más, pero jamás bajarla. Alcanza con las estadísticas del Muñeco, sus 12 títulos en siete años y medio de trabajo, para comprender que tal metodología funciona.
“Marcelo es el mejor CEO del fútbol que hay”, lo definió el propio Rodolfo D’Onofrio. Y así es: Gallardo es un Chief Executive Officer. Un director ejecutivo, además de técnico. Su agenda desafía la física: es elástica. Y aunque el área de fútbol cuenta con un organigrama con cargos que tienen funciones específicas dependiendo de las áreas de desempeño (captación, Inferiores, Infantiles, desarrollo de técnica individual, videoanálisis, preparación física, departamento médico, etcétera), de algún modo todo está bajo su supervisión y de la del manager Enzo Francescoli. Un ejemplo específico: ayer, luego de volver de Santiago del Estero cerca de las cinco de la mañana y tras una noche de festejos por la Supercopa, con pocas horas de sueño el entrenador eligió quedarse a descansar en el River Camp improvisando un sector de descanso
CON TODOS ALINEADOS EN SU IDEA, QUE SIGA NO ES UNA UTOPÍA.
en su oficina para luego poder observar, desde las 9, el partido de la Reserva ante Argentinos. Allí estuvo acompañado por Mariano Barnao, el secretario técnico y mano derecha del head coach, además de Hernán Díaz (se hará cargo de la dirección de las Divisiones Inferiores tras la salida de Gustavo Grossi), de Marcelo Escudero (DT de la Quinta división) y de Pablo Nigro, el psicólogo del staff.
Bajo la órbita del deté avanzaron diferentes iniciativas como el Proyecto Infanto-Juvenil (acompaña el crecimiento de los jóvenes del club, potenciando el sentido de pertenencia) y la modernización del Camp, desde 2016 incorporó canchas