Pagina 12

Leona dentro y fuera de la cancha

Diálogo con Majo Granatto, delantera de la Selección

- Por Rodrigo Spiess HOCKEY

@

“Miedo a opinar, nunca”, dice con simpatía, pero con aplomo en su voz. María José Granatto podría limitarse a hablar de hockey, disciplina en la que fue elegida dos veces mejor jugadora del mundo Junior y en la que trabaja con la Selección de cara a los Juegos Olímpicos de Tokio, pero rompe esas barreras para mostrar su faceta como persona común. Es que Las Leonas cumplen 20 años y ella encarna las transforma­ciones sociales y las luchas que impulsan las mujeres con cada vez más fuerza en las últimas décadas.

Con una madre profesora de geografía y un padre profesor de historia, se crió en un hogar atravesado por muchas inquietude­s. “Son personas muy lectoras y muy interesada­s en la política, por eso con mis hermanas tenemos mucha formación desde ese lado”, cuenta Majo. La lectura es un hábito que tiene incorporad­o y busca momentos por fuera del estudio para los libros que son de su interés. “Hoy voy por el lado del feminismo. Las cosas que nos atraviesan como sociedad y también como mujer”, dice la deportista que apunta a ser nutricioni­sta en esta charla con PáginaI12.

–¿Llegaste a participar alguna vez de la marcha ‘Ni Una Menos’?

–Me agarró jugando en Holanda o con algún doble turno de entrenamie­ntos en el Cenard. Nunca me pude acercar, pero siempre estoy queriendo estar. Apoyo totalmente la lucha de la mujer y del feminismo.

–¿Y qué te genera ver multitudes en el reclamo?

–Es emocionant­e y lindo ver cómo la mujer va recuperand­o ese lugar y esos derechos que le han quitado en tantos años. Estamos en una posición mucho mejor y se debe a ellas. Mi vieja y hermanas van, somos una familia comprometi­da porque hay un montón de cosas que no están como deberían ser.

–En cuanto a entidades deportivas, las bonaerense­s tendrán que aplicar la Ley Micaela de capacitaci­ón en género, ¿cuán positivo es para el deporte en general?

–Me parece espectacul­ar la aplicación de estas leyes y que la gente que por ahí no está tan aggiornada con el tema o es ajena a las cosas que están pasando, se capaciten y sepan sobre las situacione­s que está atravesand­o la mujer en la sociedad. Es un gran avance que se empiecen a tocar estos temas, que se empiecen a preocupar y ocupar las personas que lo tienen que hacer.

Militancia estudianti­l y Leonas esas

La Plata, una ciudad diezmada por el terrorismo de Estado durante la última dictadura cívico militar, fue el escenario en la que Majo creció. “Mi colegio era la Media 12, se llamaba Horacio Ungaro y mi Centro de Estudiante­s era el Centro Horacio Ungaro, que fue uno de los chicos desapareci­dos en la Noche de los Lápices –recuerda–. Yo tenía participac­ión. Me gustaba ir a reuniones y marchas”.

“Tenían convicción, seguridad y ganas de cambiar el mundo. Hoy no se ve eso en la juventud”, reflexiona sobre aquella militancia estudianti­l en tiempos de dictadura. “No estábamos en un gobierno democrátic­o y es lo que nosotros como sociedad tenemos que darnos cuenta. En eso tenemos que estar totalmente unidos, no podemos tolerar la muerte y desaparici­ón de miles de enfatiza Majo.

Granatto tiene 25 años, apenas tres más que Adriana Acosta en el momento de ser secuestrad­a, detenida y desapareci­da en 1978. Cuando Las Leonas entrenan, lo hacen en conexión directa con aquella exjugadora de Selección. “Es espectacul­ar que la cancha del Cenard tenga el nombre de una jugadora desapareci­da. Para mí eso no es mezclar con la política. Es reconocer y levantar la bandera del Nunca Más”, asegura.

–¿Cómo atraviesa a una adolescent­e de La Plata esa historia de lucha estudianti­l?

–Yo me tomaba personas”, el bondi y lo hacía con el boleto estudianti­l. Hubo pibes y pibas que lucharon por conseguirl­o y murieron por eso. Es una ciudad totalmente golpeada en ese sentido. Es lo que me hizo querer participar. Yo quería dejar algo en el Centro de Estudiante­s, por más insignific­ante que sea: una huella en tiempos que por suerte son democrátic­os. Moviliza mucho ser de esta ciudad y es imposible ser ajeno a su historia.

–¿Te pasa de tener que responder al comentario “estás muy politizada, Majo”?

–Lo sabemos todos, el hockey es un deporte muy elitista. Es muy caro por su equipamien­to, su cuota en un club y exige un poder adquisitiv­o que no está al alcance de todos y es la realidad. Hoy en día hay más barrios y escuelas a los que está llegando y eso me pone contenta. Es un deporte en el que no se habla mucho de política. No se tocan tanto esos temas.

–¿Es tan cerrado el ambiente?

las opiniones para no generar un clima de conflicto. A mí no me disgusta hablar, yo hablaría todo el tiempo y si pensás distinto, no te voy a hacer la cruz. Para mí es totalmente respetable. En mi casa sí se discuten temas con hermanas y mis padres. No hay un enfrentami­ento, es un intercambi­o de opiniones, es crecer y está buenísimo, es nutritivo.

–¿Cuánto una casa en el mango? te sirvió surgir de la que no sobraba

A 20 años del nacimiento de Las Leonas, una historia que une al deporte con la militancia estudianti­l y las luchas de las mujeres.

–Me sirvió para forjar mi personalid­ad y ser lo que soy, con mis valores, virtudes y defectos. Puedo ser una persona que se preocupa por el otro. Así me hicieron mis viejos: Nunca ajena a los problemas de la sociedad. Primero somos ciudadanas de un país y después somos atletas de alto rendimient­o.

–¿Sentís que reflejás de alguna manera los cambios de la mujer en estas décadas?

–Las Leonas también hace 20 años que empezaron a dejar una huella grande sobre lo que son las problemáti­cas de la mujer y

“Es emocionant­e y lindo ver cómo la mujer va recuperand­o ese lugar y esos derechos que le han quitado en tantos años.”

gracias a ellas se empezó a hablar más de la mujer en el deporte. Se generaron el lugar ellas solas y ahora me toca estar ahí adentro. Las Leonas tuvieron que ganar mucho para ser reconocida­s, pero aún así sigue siendo un deporte al que no se le da tanta importanci­a. La mujer en el deporte sigue un poco relegada.

–¿En lo particular ustedes suelen ser consciente­s de que inspiran a las nenas en el deporte?

–Bienvenido sea si somos referentes desde el esfuerzo, la humildad y valores que implican ser Leona. Hay historias detrás de cada una con el esfuerzo que hacemos. Nadie sabe el trasfondo. Casi todo el equipo estudia y entrena.

–Bueno, también demostraro­n que se puede ser madre y atleta en el alto rendimient­o.

–Tal cual. Tenemos compañeras que fueron madres y volvieron o muchas que están postergand­o su maternidad: Entienden que el objetivo hoy es otro y se priorizan como deportista­s. Otras por ahí no quieren ser madres. Cada una tiene su visión y está bueno priorizars­e, pensar en una. Eso no es una traba: Se puede ser deportista, estudiante, madre. Somos mujeres y nacimos para serlo todo.

 ?? Prensa CAH ?? María José Granatto, delantera de Las Leonas.
Prensa CAH María José Granatto, delantera de Las Leonas.
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina