“Es un abandono como cualquiera”
Una pareja argentina los adoptó en 2019 y el 17 de noviembre los “devolvió”, como si fueran un paquete, “por problemas de convivencia”.
Los dos nenes africanos que fueron abandonados por su padre adoptivo en una comisaría de Bahía Blanca “están muy bien en el hogar pero siguen preguntando cuándo los van a venir a buscar”, contó Letizia Tamboribdeguy, licenciada en Trabajo Social e Integrante del equipo interdisciplinario de la Comisaría de la Mujer de la localidad bonaerense.
El martes de la semana pasada, según reveló un periódico bahiense, un hombre de la localidad neuquina de San Martín de los Andes llegó a la Comisaría de la Mujer y la Familia de Bahía Blanca y dejó a los pequeños de 6 años, nativos de Guinea Bissau, quienes estaban a su cargo desde 2019.
Los niños, informaron los investigadores, habían llegado a la localidad bonaerense en agosto de ese año, luego de ser adoptados por el hombre y su pareja, con quienes convivieron durante una semana en el hogar en el que se encontraban. A comienzos de año, la familia dejó su casa en Bahía Blanca, en la que también vivía una hija biológica del matrimonio, y se mudó a Neuquén.
“Los dejó con un bolsito con su ropa, los nenitos nunca registraron que los dejaban para no venirlos a buscar, ellos quizás interpretaron que se trataba de un juego y que después los iban a volver a buscar”, relató Letizia Tamboribdeguy, quien calificó el caso como “terrible” porque “se vulneran todo tipo de derechos”. “Tienen 6 años, es difícil que registren una situación de abandono. Ellos están muy bien en el hogar, pero siguen preguntando cuándo los van a venir a buscar”, lamentó la especialista.
Para Tamboribdeguy y el equipo que recibió el caso, se trató de “una decisión familiar, por eso el hombre viajó desde el sur, que es donde viven, a dejar los niños y después decidió volver con su familia originaria”.
El hombre “era determinante en su postura. De hecho, lo dejó por escrito. Aseguraba no poder sostener el vínculo, problemas de convivencia, dificultades para poner límites porque había algunas costumbres totalmente diferentes, cosas que vienen arraigadas culturalmente y que ellos no pudieron sobrellevar”, indicó.
En tanto, la Defensora de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, Marisa Graham, aseguró que “hace muchos años venimos registrando casos similares” al de los mellizos africanos, por eso “el Código Civil sigue prohibiendo la adopción internacional”.
“Hace muchos años que registramos casos similares a este, lamentablemente: en su momento tuvimos niñas y niños haitianos, en otra época rusos, ahora muchos ucranianos”, dijo Graham.”Es una situación más usual de lo que se cree, sólo que este caso se conoció porque los niños fueron abandonados en una comisaría”, agregó.Y estos abandonos “o incluso pedidos de nulidad de adopciones” también tienen lugar “con adopciones tramitadas en la Argentina”, un fenómeno sobre el que “no hay un registro a nivel nacional”. Por eso “nosotros seguramente en estos días vamos a sacar recomendaciones (para los organismos de niñez) en relación al tema” desde la Defensoría, como se sacaron de otras problemáticas.
Y estos abandonos también tienen lugar “con adopciones tramitadas en la Argentina”, un fenómeno sobre el que “no hay un registro a nivel nacional”. “Sabemos por la Asesoría Tutelar de la Ciudad de Buenos Aires que 2 de cada 10 niños adoptados o en guarda preadoptiva de hasta 8 años son abandonados, y entre los mayores de 8 años ese porcentaje crece a 5 de cada 10”, dijo.Y los argumentos para el abandono suelen ser de lo más variopintos. “Recuerdo el caso de una bebé argentina de 8 meses que la ‘devolvieron’ porque dijeron que ‘nuestra familia no asimila una niña tan morochita’”, dijo. La funcionaria advirtió que se habla incorrectamente de “devolución” cuando en realidad “es un abandono de un hijo como cualquier otro, e igual de lamentable” porque “una vez que hay una adopción existe un vínculo filiatorio” de lo que se deriva “lo que antes llamábamos patria potestad y hoy llamamos responsabilidad parental”.”Por eso, la República Argentina sostuvo una reserva al artículo 21 (del Código Civil) en relación a la adopción internacional, porque pasan estas cosas y los niños quedan abandonados”, dijo. No obstante esa prohibición, “evidentemente se sortean de alguna manera” y algunas parejas consiguen adoptar niños y niñas en el extranjero “por caminos que son ilegales”.”Lamentablemente, en la mayoría de los casos de adopciones de extranjeros, sea de adultos extranjeros que pretenden adoptar niños argentinos o al revés, hay una intermediación de agencias internacionales de adopción y de intermediarios que lucran con estos temas”, dijo.En el caso de niños adoptados por argentinos en el extranjero, una vez que ingresan al país con una sentencia de adopción dictada en el extranjero “estamos obligados a reconocerla en cumplimiento de diferentes tratados internacionales”.Y en los casos de posterior abandono, “lo que hace Argentina es hacerse cargo de esos niños”, que en algunas oportunidades implica trabajar con el consulado para que regresen a su país de origen porque volver a adoptarlos aquí “no se puede porque sería una adopción internacional”. Para Graham, la raíz del problema radica en la “idealización de la adopción”.
“A una bebé argentina de 8 meses la ‘devolvieron’ porque dijeron que ‘nuestra familia no asimila una niña tan morochita’”.