Nueva denuncia a Marilyn Manson
Una mujer, que por entonces era adolescente, presentó su reclamo contra el cantante ante la Justicia de Estados Unidos.
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Marilyn Manson sumó una nueva denuncia en su contra por supuestos delitos de abuso sexual y amenazas contra menores de edad. Los hechos relatados ante los tribunales estadounidenses por la denunciante ubican a Manson como el responsable de forzar a una adolescente de 16 años a mantener relaciones sexuales con él entre 1995 y 1999, cuando el cantante tenía 26 años.
Actualmente, Brian Warner –el verdadero nombre del artista– tiene 54 años y acumula varias demandas por distintos tipos de violencia de género por parte de varias mujeres de su entorno, aunque sistemáticamente negó las acusaciones.
Las discográficas que lo acompañaron durante su carrera musical, Interscope Music y Nothing Records, también están señaladas en la demanda. Según consta en el acta judicial, las empresas están acusadas de “celebrar y promover” los comportamientos abusivos del cantante “para su ganancia financiera colectiva”.
“Como es típico con un depredador sexual, el acusado Warner siguió ejerciendo poder y autoridad para mantener control sobre la denunciante. Como resultado (...) de su comportamiento opresivo y constante, la denunciante fue incapaz de defenderse y salir del abuso”, relató.
Las acusaciones
La primera que hizo pública una denuncia contra Manson fue la cantante Evan Rachel Wood (52), expareja del músico. Lo hizo en febrero de 2021 a través de una publicación en redes sociales. Wood había asegurado que Manson empezó a groomearla cuando era una adolescente y abusó de ella “de forma horrorífica durante años”. “Me lavó el cerebro y me manipuló hacia la sumisión”, contó la actriz.
En mayo del mismo año, Esmé Bianco, actriz de la conocida serie Games of Thrones le siguió con una demanda en la Corte Federal, acusándolo de diversos tipos de abuso y violencia. Entre ellos, asegura que la llevó desde Inglaterra a California para participar en producciones audiovisuales que nunca existieron, violando las leyes de tráfico de personas.
En esa ocasión, Bianco aseguró que el cantante la dejó encerrada en una habitación, sin permitirle alimentarse ni dormir, la golpeó, la amenazó y hasta le infligió descargas eléctricas.
En otra instancia, una exasistente de Warner lo acusó de ejercer violencia sexual, agresión y acoso en su contra, utilizando “su posición de poder, fama y conexiones para explotarla y victimizarla durante todo el tiempo en que trabajó para él”. ◢
El juicio por el asesinato de Lucio Dupuy tendrá su sentencia mañana cuando la Justicia pampeana determine la autoría y responsabilidad penal de la madre del niño, Magdalena Espósito Valenti, y de su pareja, Abigail Páez. Esto es, si son culpables o no las acusadas por el crimen del niño de cinco años. El caso conmueve no solo por la tragedia de esta muerte niña. Sino, y quizá más aún, porque expone los abusos en las relaciones intrafamiliares, y la violencia infantil que, pudiendo prevenirse, pasó inadvertida para los adultos que asistieron a Lucio en más de una oportunidad, en la ciudad de Santa Rosa, en La Pampa. Allí ocurrió el homicidio, en noviembre de 2021.
A la espera de la sentencia crece el debate por la responsabilidad del Estado en este crimen, por la ausencia de control que deviene en la tragedia de su muerte. Hoy, organizaciones civiles reclaman la sanción de la “Ley Lucio”, que busca capacitar en derechos de los niños a funcionarios públicos. En tanto la familia Dupuy demandará al Estado provincial y a su Ministerio de Salud, por no haber advertido la gravedad de la situación. Esto es un punto crítico para los expertos en infancias, que sin embargo, sostienen que la legislación vigente da respuesta, pero la falta de recursos impide la posibilidad de implementarla a consciencia, en todo el territorio nacional.
El de Lucio “lamentablemente, se convierte en un caso emblemático” explica la abogada Yael Bendel, especialista en infancias y adolescencias. Por el impacto del horror al que fue sometido, su muerte se transforma en referencia: “No es la primera y vez y no va a ser la última en la que el Estado tiene muchos indicadores, y avisos sobre una situación de vulneración de derechos contra un niño, y no interviene, o interviene de modo precario, o de mal modo”, detalla Bendel, quien fue asesora General Tutelar en CABA, y Presidenta del Consejo de Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes.
Sin embargo advierte que la creación de una nueva normativa –la Ley Lucio, que está previsto tratar en las sesiones extraordinarias del Congreso–, no aporta más herramientas. “Nuestro Estado en este tema tiene una legislación comparable a la de los países más desarrollados. En todo caso se trata de falta de cumplimiento de las normas no de un problema de las normas” afirma. Por lo que se debería tratar de fortalecer el sistema vigente.
Bendel habla de “tres pilares”: la Convención Internacional de derechos del Niño, la Ley 26.061, y la ESI, que no solo educa a los niños, también a los adultos. Y sobre la 26.061, la abogada repasa: “define un sistema de protección integral”. Esto significa “que todo el Estado y esto incluye a la sociedad –advierte– debe velar por la integridad psicofísica de los niños. Y cada vez que alguien se
"Como es típico con un depredador sexual, el acusado Warner siguió ejerciendo poder y autoridad para mantener control sobre la denunciante."