8º SALÓN DE BUENOS AIRES COBERTURA:
La muestra automotriz porteña es un reflejo de la actualidad del sector.sector Hubo algunas marcas nuevas, nuevas pero muchas ausencias, entre lanzamientos, modelos eléctricos, deportivos y fantásticos concepts.
Marca por marca, modelo por modelo, todas las novedades y curiosidades.
Con la asistencia de 544.545 visitantes que contemplaron las 345 unidades exhibidas por los 135 expositores participantes, la octava edición del Salón Internacional del Automóvil de Buenos Aires será recordado como aquella en el cual las marcas importadas volvieron a la vida. En los pasillos de La Rural fueron muchos los modelos de origen extrazona que aparecieron en exposición, muchos de ellos representando a marcas debutantes en el mercado local.
Pero, obviamente, también hubo lugar para unidades de todos los segmentos, con especial participación de productos del segmento B (compactos), SUV y pick-up. Concept y deportivos en proporciones similares, mostraron el costado más radical de la industria, mientras que los de propulsión alternativa se repartieron entre híbridos y eléctricos, aunque sin atraer al público como la defensa del medio ambiente lo demanda.
Esta vidriera de la industria automotriz fue también un espacio de gran importancia, tanto que dejó en evidencia a aquellas marcas que decidieron orientar la inversión que demanda participar en una muestra de esta magnitud e importancia (unos sesenta millones de pesos en promedio) hacia otros fines. Alfa Romeo, BMW, Hyundai, Jaguar, Kia, Land Rover, Lifan, Porsche, Subaru, Suzuki y Volvo, forman parte de una lista (sin detenernos en los camiones) que, esperemos, sea mucho más corta en 2019.
El Salón Internacional del Automóvil de Buenos Aires es, sin duda, una de las más importantes reuniones automovilísticas de la región (la segunda, después de la de San Pablo, Brasil), un espacio dedicado no solo a la exhibición de autos y sus derivados, sino también a cultivar esa inexplicable pasión que despiertan los motores.