Mantenimiento:
Rótulas de suspensión y dirección
La rótula consta de una semiesfera con un vástago cónico roscado por un extremo: la forma de este vástago es semejante a la de un hongo. La parte esférica está encerrada en un casquillo, también esférico, y es lubricada por una capa final de material autolubricante, como el teflón. Generalmente, la parte cónica se introduce en un agujero del brazo de las suspensiones, mientras que el casquillo que protege la parte esférica está sujeto con tornillos en un asiento que lleva el cuerpo del eje. Una pieza de goma sintética actúa como sello e impide la entrada de la suciedad y mantiene la carga de grasa lubricante. Para los demás grupos mecánicos, las uniones pueden realizarse de una manera diferente. Una rótula especial es del tipo Uniball, empleada principalmente en los automóviles de competición por los grandes ángulos de giro que permite. Acerca de todo esto y expresado de manera sencilla pero exacta, las rótulas son partes de la suspensión delantera y de la dirección; sostienen el peso del automóvil y conectan las barras tensoras, resortes, amortiguadores, y otras partes de la suspensión a las ruedas. Las rótulas permiten el movimiento de la suspensión en los tres ejes, son partes pequeñas en relación al esfuerzo que
realizan y al desgaste que sufren, por lo cual su diseño y fabricación es muy importante para la seguridad de los ocupantes del automóvil. Una de las partes más importantes de la suspensión y de la dirección son las rótulas. Desde el punto de vista mecánico, permiten el movimiento en toda dirección (arriba, abajo y el giro de las ruedas) y es una unión entre el porta masa y los brazos de control. Con el tiempo, los componentes comienzan a desgastarse y se aflojan por conducir muchas veces sobre baches y debido a la rotura de otras partes de la suspensión o de la dirección conectadas a las rótulas.
El diagnóstico de fallas
El automóvil puede presentar varias señales de que las rótulas han comenzado a fallar:
-Ruido: La primera señal de que las rótulas de un automóvil han comenzado a fallar es un golpeteo metálico que proviene de la parte delantera. El sonido es como de alguien que martilla sobre una placa de metal. Este ruido puede ir aumentando con el tiempo y puede o no oírse de manera permanente. Además, puede aumentar cuando se realiza un giro, en especial uno cerrado, y al pasar sobre baches y terrenos muy irregulares.
-Tocar el suelo: La segunda señal de rótulas defec-
tuosas es un fuerte chirrido que suena como si el vehículo estuviera rozando el suelo. Este sonido puede prevenir de ambas rótulas o de un solo lado y puede estar acompañado de un golpeteo.
-Desgaste del neumático: Se debe utilizar una linterna para revisar los neumáticos mientras el automóvil se encuentra elevado. Si se observan surcos en las bandas de rodamiento o un desgaste irregular, uno o más componentes de la suspensión está fallando, incluyendo las rótulas, los resortes y la barra estabilizadora. Este método para determinar el estado de las rótulas no es un cien por ciento seguro, pero puede indicar de forma temprana un problema con la suspensión.
-Revisión de las ruedas: Utilizar un gato o críquet para elevar las ruedas delanteras del automóvil, y colocar una mano en la parte inferior de una rueda y la otra en la parte superior. Después, agitar la rueda e intentar escuchar un golpeteo. Si se oye, significa que la rótula está comenzando a fallar.
-Inspección física de las rotulas: Con el vehículo elevado, ubicar las rótulas. Están compuestas como hemos señalado por un perno con una bola de acero en su extremo, que va introducida en un alojamiento cilíndrico, generalmente cubierto de manera parcial por un fuelle de goma, diseñada para retener la grasa (lubricante que actúa como refuerzo del teflón para reducir el desgaste) que lubrica la articulación. Mover entonces el fuelle de goma; si se mueve libremente junto con la articulación, entonces la rótula ya no sirve. Si el fuelle está seco y duro y se mueve libremente, pero sin la articulación, entonces el fuelle está deteriorado.
Mantenimiento
Las rótulas de la suspensión y de la dirección son piezas de precisión que deben funcionar siempre a la perfección. En los talleres especializados en tren delantero se realizan comprobaciones de las rótulas y de sus componentes así como de la suspensión y la dirección en general. Si es necesario cambiarlas se deberán colocar repuestos originales que ga-
ranticen la alta calidad necesaria. El automovilista puede realizar una inspección visual de las rótulas y podrá comprobar por ejemplo el estado de los elementos de goma (fisuras, rajaduras, roturas) y eventuales pérdidas de grasa. Esta tarea se puede concretar cada 10.000 kilómetros, en un automóvil que no está sometido a circulación por calles y caminos en buen estado. Si este fuera no el caso, por ejemplo al transitar por pavimentos con baches a veces inevitables, habrá que revisar las rótulas cada 5.000 kilómetros. Todavía hay en circulación muchos modelos de automóviles de anteriores generaciones cuyas rótulas deben ser engrasadas desde el exterior, y para poder hacer el trabajo, poseen un pico de engrase o “alemite”, por el cual penetra la grasa que se inyecta con una herramienta especial que poseen las estaciones de servicio, y que se utiliza al ubicar el automóvil en la fosa. Nos resta señalar que, a veces, basta solo con “agarrar” un bache profundo en el pavimento y cuando marchamos a regular velocidad, para inutilizar una rótula de suspensión o dirección.