NOTICIAS
El ex CEO de FCA Automobiles y Ferrari falleció el pasado mes de julio. Repasamos aquí sus principales logros, que lo convirtieron en una de las personalidades más influyentes de la industria automotriz mundial.
La noticia sorprendió al mundo entero. A mediados de julio, un comunicado de FCA Automobiles rezaba que Sergio Marchionne se retiraba de la compañía ítalo-americana por motivos de salud. Días más tarde, el triste desenlace: su ex CEO, encargado de salvar a Fiat de una grave crisis y de convertirla en un gigante de la industria automotriz mundial fallecía en un hospital de Suiza, donde se encontraba internado.
No caben dudas de que Marchionne ha sido una de las personalidades más destacadas de la industria automotriz durante las últimas décadas: “el hombre del suéter oscuro” tenía un aura particular que lo llevó a ejercer un liderazgo implacable en la compañía.
Nacido en la localidad de Chieti (Italia) el 17 de junio de 1952, y cuando tenía 14 años de edad se trasladó con su familia a Toronto (Canadá) donde comenzó su carrera profesional. Licenciado en Filosofía, Economía y Derecho, su llegada a Fiat se produjo en el año 2003, asumiendo como miembro de la junta del grupo. Al año siguiente, ya como CEO de la compañía, comenzó su tarea para sacarla de su catastrófica situación: por entonces la automotriz sufría pérdidas diarias por dos millones de euros.
Su primer gran logro fue la ruptura del acuerdo con General Motors. La negociación terminó con un pago de 2.000 millones de dólares por parte de GM por desistir de la compra de la automotriz italiana. De esta forma, la compañía contaba con un mayor margen de maniobra. El segundo paso fue saldar las deudas con los bancos.
En 2007 comenzó a comercializarse el nuevo Fiat 500, modelo que tuvo desde su lanzamiento un gran éxito de ventas, y ayudó al despegue de la empresa. De las pérdidas de 1.500 millones de euros en 2004, Fiat pasaba, tres años después, a lograr un beneficio neto de 4.400 millones. Dos años más tarde, en el marco de la crisis mundial, Marchionne iba al rescate de Chrysler.
De la adquisición de la compañía estadounidense, en 2014, nacía FCA. Así, la facturación de la compañía pasó de los 47.000 millones de euros en 2004 a los 141.000 millones en el pasado ejercicio 2017.
En 2014 Marchionne también se e puso al frente de Ferrari, en reemplazo o de Luca di Montezemolo. Cuando o asumió la presidencia, la compañía a se encontraba estancada y el equipo de Fórmula 1 no pasaba por su mejor momento. Gracias a su intervención, la marca del Cavallino Rampante volvió a ser estandarte de la familia Agnelli y se creó una sociedad separada de Fiat que cotiza en bolsa, luego de recuperar el 90 por ciento de las as acciones que dependían de bancos e inversores.
Su última visita a la Argentina data de marzo de este año. En su estadía, el directivo se reunió con Mauricio Macri en la Casa Rosada, donde le ratificó la confianza del grupo en el futuro argentino: la automotriz planea realizar una fuerte inversión en Sudamérica para producir nuevos motores nafteros turbo, aunque por el momento no dio a conocer si los fabricará en la Argentina o en Brasil.
En el plano mundial, el desafío de FCA será continuar por el camino marcado por este hombre que, en 14 años, se transformó en un referente del sector automotor. Adiós a un fuera de serie.