Perfil Cordoba

françoise bettencour­t, la francesa que se convirtió en la mujer más rica del mundo

tras la muerte de liliane Bettencour­t, su hija es la heredera del imperio del l’oréal (del que su madre retenía el 33 por ciento). según el ranking Forbes de este año, su fortuna supera los u$s 44 mil millones.

- AGUSTIN GALLARDO

No caben dudas de que la muerte de Liliane Bettencour­t tiene para su hija, Françoise Meyers-Bettencour­t –más allá de la tristeza lógica–, cierto dejo de alivio. Después de muchos años de distanciam­iento, internas familiares y costosas guerras judiciales, ella es la heredera de 44,7 mil millones de dólares, fortuna que ostentaba su madre según el listado 2017 de Forbes.

“Mi madre ha partido tranquilam­ente”, escribió François en un sencillo comunicado el jueves 21 de septiembre. “En este momento doloroso para nosotros, expreso en nombre de mi familia, nuestro entero compromiso y fidelidad a L’Oréal y a la renovación hecha por su presidente, JeanPaul Agon, y sus equipos en el mundo entero”, agregó la heredera. Liliane falleció en la noche del miércoles pasado en su petit hotel de Neuilly -sur-Seine, en las afueras de París. Estaba por cumplir 95 años el próximo 21 de octubre. Bettencour­t había heredado el grupo L’Oréal tras la muerte de su padre, Eugène Schueller, en 1957.

Aunque de bajo perfil pero socialment­e famosa por el poderío de su ciompañía, su vida se convirtió en foco de los medios –no sólo de su país– cuando se hizo pública su relación con el fotógrafo y dandy François-Marie Banier, a quien conoció durate una sesión de fotos que éste le hiciera para una revista.

Esa relación fue el inicio de una disputa entre madre e hija que terminó dirimiendo­se en la Justicia. Françoise sintió que debía poner coto a lo que considerab­a abusos por parte de Banier en perjuicio de su madre y de su patrimonio. Se dijo que el fotógrafo logró que Liliane no sólo le regale obras de arte de su colección sino propiedade­s, acciones y regalos por valor de mil millones de dólares.

Fue en ese contexto que Liliane se aisló de su hija y Bettencour­t repartía su tiempo entre su hotel particulie­r de Neuilly sur Seine, la mansión que su padre había construído en Bretaña en 1920, su casa en Mallorca, o su isla en las Sey-

liliane está casada y tiene dos hijos. toca el piano y escribió libros de

tinte religioso

chelles. Le gustaba estar siempre al sol o nadando. Quienes la conocieron la describen como una mujer de carácter, discreta y refinada, con una “honestidad brutal”.

Vida. Liliane Henriette Charlotte Betsy Quenoa Schueller nació el 21 de octubre de 1922 en París. Es hija de Eugène Schueller, el fundador de L’Oréal. En los años 30, la empresa de su padre comenzó a crecer gracias al lanzamient­o de tinturas que él comenzó a vender puerta a puerta. Schueller tiene en su historia un detalle incómodo: terminada la segunda guerra mundial se lo acusó de financiar a La cagoule, un grupo antisemist­a y de extrema derecha. Fue su hija Liliane quien, muchos años después, pidió disculpas públicas por esa situación familiar. Pero por cosas de la vida, un ex integrante de La Cagoule, André Bettencour­t terminó siendo marido de Liliane. Ambos se casaron el 8 de junio de 1950 y al poco tuvieron a su única hija, Françoise. Para 1957, Liliane ya era la dueña de L’Oréal.

En 2007, André falleció y al año siguiente comenzaron los problemas familiares entre madre e hija. Françoise denunció al amigo fotógrafo de su madre. Fueron dos años de idas y vueltas judiciales hasta que Liliane decidió retractars­e de todo aquello que había concedido a su amigo fotógrafo (ver recuadro).

El año 2010 vio a esta hija reconcilia­rse con su madre, y en 2012, con apenas 25 años, el primogénit­o de Françoise, Jean-Victor Meyers, tomó el relevo en el consejo de administra­ción del imperio del cosmético después de un acuerdo judicial. El nieto de Liliane se puso al hombro de forma imparcial y objetiva tras las disputas mediáticas familiares y legales que habían tenido su madre y su abuela. “Esta es una empresa que forma parte de mi vida”, comentaba en ese entonces Jean-Victor.

La dueña. Françoise es, entonces –tras la muerte de Liliane–, quien estará al mando de todo aunque, según informan medios franceses, tendrá que consultar con su propio hijo Jean-Victor algunas decisiones. Ella tiene otro hijo, Nicolas, de aún más bajo perfil. Por razones obvias, aún se desconoce si legará el control en el actual CEO de la compañía, o si tomará las riendas y desarrolla­rá una faceta empresaria­l de la que siempre se mantuvo al margen, algo similar a lo que le pasó a su madre cuando heredó la compañía, en 1957. También habrá que ver si sigue con su carrera como pianista y escritora, esta última una profesión que la ha encontrado escribiend­o obras, incluso una sobre la Biblia, aunque es judía.

 ??  ??
 ?? L’OREAL CORPORATE FOUNDATION ??
L’OREAL CORPORATE FOUNDATION
 ?? FOTOS: AFP ??
FOTOS: AFP

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina