Darín y Mercedes Morán coparon San Sebastián
Ambos artistas abrieron el festival español con El amor menos pensado, película que compite por el gran premio. Ella, además, presentó otro filme nacional. Y ante la prensa Darín habló sobre el FMI y sobre Valeria Bertuccelli.
El cine argentino tiene un gran año en los festivales internacionales europeos. Tanto en Cannes como en Venecia las películas nacionales recibieron elogios y compitieron por los principales premios. Ahora es el turno de San Sebastián donde la presencia de producciones realizadas en el país es récord histórico. En esta oportunidad fueron Ricardo Darín y Mercedes Morán los encargados de abrir el festival con El amor menos
pensado. El film, que se estrenó el 2 de agosto en Argentina y superó las 700 mil entradas vendidas, recibió varios minutos de aplausos tras la proyección.
“La química se da o no se da; si no hay, se puede trabajar, pero es más fácil cuando todo va y viene con fluidez y gracia”, señaló Darín en relación a sus compañeros de trabajo. Si bien se mostró contento por la participación aclaró que “con el tema de los premios no se enrolla mucho. Las premiaciones, distinciones y reconocimientos son algo polémico, porque para destacar a alguien hay que desatender otros trabajos. Es muy subjetivo y mi máxima pretensión es llegar a la audiencia”, expresó.
Además de la película, ante la prensa ibérica Darín respondió a otros temas relacionados al momento económico que vive Argentina. “Los préstamos siempre han sido una cuestión cíclica argentina. Lo que más me preocupa en términos de argentinidad es que parece un ciclo del que no podemos escapar”, indicó en referencia al vínculo con el FMI. “Volvemos a pasar por los mismos lugares con la sensación de no haber aprendido la lección”.
El único momento de tensión que vivió en la conferencia de prensa fue cuando un periodista le consultó sobre el episodio que relató Valeria Bertuccelli. “Es una mancha que difícilmente me pueda sacar de encima jamás, pero al mismo tiempo una nube abstracta poco definida sin acusación formal ni concreta”, dijo. “Fue un error muy grande sacar en público una cuestión privada entre colegas cuatro o cinco años después. Es una nube que me va a acompañar toda la vida”.
En familia. Junto a Ricardo estuvieron presentes su hijo, Chino, y su nuera, Ursula Corberó. El joven está relacionado con El amor menos pensado porque junto con su padre son parte de la producción del filme a través de Kenya, la productora que ambos –y Federico Posternac– crearon. Además, en la sección
Perlas, que exhibe las mejores propuestas que pasaron por otros festivales, se proyectará El ángel.
Quien también utilizó el viaje para estar con su hija fue Mercedes Morán. “En San Sebastián junto a Manu Martínez. La mejor compañía”, escribió en sus redes sociales junto a una imagen de ambas. La joven, quien es hija de la actriz y de Oscar Martínez, aplaudió a su madre tras la exhibición de El amor menos
pensado y estuvo a su lado cuando se proyectó Familia
sumergida, otro filme argentino que se presentó en el festival durante el primer día.
“La película surgió de observar a personas cercanas que están experimentando duelos, de la parte material de esos procesos, lo que tiene que ver con desmantelar una casa o encontrar objetos del fallecido, y su aspecto más metafísico, sobre los sentimientos que tienen las personas que se quedan”, explicaron a la prensa. El largometraje es la ópera prima de María Alché y compite en la sección Horizontes Latinos.
Presencia latina. El amor menos pensado será una de las producciones argentinas que intentará obtener la Concha de Oro a mejor película. La otra es Rojo del director Benjamín Naishtat y protagonizada por Darío Grandinetti, Andrea Frigerio y Alfredo Castro. El thriller se adentra en los años 70 y en la situación política que vivió por entonces la Argentina.
También hay otros diez filmes que se presentarán por fuera de la competencia principal. Dentro de los más destacados se encuentran Sueño
Florianópolis, de Ana Katz, El motoarrebatador, de Agustín Toscano, y Figuras, de Eugenio Canevari. Además, en la sección Nuevos Directores, que apunta a mostrar a nuevos talentos se presentarán Julia
y el Zorro, de Inés María Barrionuevo, Para la guerra, de Francisco Marise, Teatro de Guerra, de Lola Arias; y Las
hijas del fuego, de Albertina Carri.
A ellos se suma el argentino Nahuel Pérez Biscayart quien integra el jurado y elegirá qué películas serán las premiadas cuando el festival llegue a su fin. De esta manera la edición 2018 de San Sebastián será la que más presencia de argentinos tenga y en las delegaciones hay mucha expectativa por obtener alguna de las distinciones que se otorgarán.
“Pasamos por los mismos lugares con la sensación
de no haber aprendido la lección” “Fue un error muy grande sacar en público una cuestión privada años después”