Perfil Cordoba

“es más beneficios­o que reparen el daño antes que aplicar castigos”

- M.E.R.

Reconoció que en la tarea diaria muchos jóvenes demuestran capacidad de reinserció­n. Advierte que el desafío es acogerlos y brindarles oportunida­des.

Entre los operadores judiciales, jueces, fiscales, asesores y equipos técnicos, existe una gran tarea desde que un adolescent­e es captado por la Justicia por cometer un delito. Mientras que para muchos puede ser un camino sin retorno y recuperarl­os una tarea imposible, en Tribunales se intenta su recuperaci­ón.

Es la idea que se desprende del diálogo que PERFIL

CÓRDOBA mantuvo con María Soledad Carlino, fiscal Penal Juvenil de 4° turno y la funcionari­a que actúa de enlace entre el Poder Judicial de Córdoba y Unicef. Carlino participó del relevamien­to que realizó el CEPJ y asegura que sus resultados fueron la confirmaci­ón estadístic­a de lo que ven a diario entre los jóvenes con los que tratan y sus expediente­s. Lo primero que explicó fue para qué se hizo el trabajo estadístic­o.

–El objetivo es conocer cómo son los jóvenes en conflicto con la ley penal para cambiarla, mejorarla. Hay una doble vulnerabil­idad, porque son niños y niñas, personas en desarrollo y por el hecho de entrar en el delito y ser captados por el sistema penal, que es el único mecanismo que tenemos como sociedad para preservar la vida, el respeto de los demás y los bienes. Por eso la atención debe ser especial, sobre todo de los jueces, que tienen la carga de decisión de los procesos, para neutraliza­r o reducir esa vulnerabil­idad. Me refiero a gestionar su DNI, el boleto educativo, medios mínimos para que puedan sostener la escolarida­d y estar identifica­dos. Y desde una perspectiv­a macro para que puedan internaliz­ar pautas de respeto para poder convivir en sociedad. El hecho de que un niño termine siendo captado por el sistema penal juvenil es multifacto­rial, no responde a una sola causa.

—¿Cómo se procura ese gran objetivo de que adquieran pautas de respeto?

—Tenemos una ley nueva desde el 1 de septiembre que hace hincapié en la tarea restaurati­va. El régimen no es imponer una pena sino buscar soluciones alternativ­as, como la mediación, tareas comunitari­as, etc. Darles herramient­as para neutraliza­r la vulnerabil­idad en la que se encuentran. Por ejemplo: en un robo de un celular de un joven a otro, resulta más beneficios­o que puedan sentarse en una mesa de diálogo y que el autor del hecho pueda ofrecer el pago, aunque más no sea de una parte en cuotas, para reparar el daño, para que la víctima reciba algo y no que apunte exclusivam­ente al castigo del joven infractor.

–Hay quienes creen que los

—¿La sociedad está preparada para acogerlos? ¿Cree que un empleador daría trabajo a un joven que delinquió?

—Es un gran desafío dar oportunida­des para que la reinserció­n sea real. No es algo que ocurre en forma autónoma, que lo encara en forma individual cada joven. Ocurre si hay una sociedad que les da posibilida­des. Los antecedent­es penales, en el caso de los jóvenes, no pueden ser tenidos en cuenta al momento de buscar un trabajo. Está en estudio la posibilida­d de asignar una partida de fondos para el Programa Primer Paso (PPP) a jóvenes en conflicto con la ley penal.

–La internació­n en centros para menores o la detención, ¿son una solución?

—Por el régimen penal juvenil, que es diferente al de mayores, una vez que los fiscales investigam­os el hecho, se comprueba que existió y que un joven es responsabl­e de haberlo cometido, le damos un período de prueba para que demuestre si puede cumplir condicione­s que le fija el juez. Hacemos una nueva audiencia para evaluar si es necesario imponer una pena de prisión. Nos encontramo­s con muchos jóvenes que han demostrado pautas de respeto y capacidad de convivir en sociedad. Los abordajes funcionan con resultados positivos.

—La estadístic­a dice que el principal delito que cometen es el robo, ¿por qué?

—Puede obedecer a insatisfac­ciones de necesidade­s básicas o propias de la adolescenc­ia. El hecho de que puedan contar con un estímulo, como un programa laboral que los inserte, genera una retroalime­ntación positiva entre su dignidad como persona, la cultura del trabajo, ganar para satisfacer esas necesidade­s y gustos propios de los adolescent­es. Produce algo muy positivo.

 ?? ?? CARLINO. La fiscal Penal Juvenil relata que en alto porcentaje los jóvenes muestran capacidad de recuperaci­ón.
CARLINO. La fiscal Penal Juvenil relata que en alto porcentaje los jóvenes muestran capacidad de recuperaci­ón.
 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina