En busca del voto antisistema
Poco a poco las piezas del conflicto social y político se van moviendo. Mientras el gobierno nacional intenta estabilizar la economía, la pelea por la distribución del ingreso más la búsqueda de posicionamientos políticos nos van llevando a escenarios conflictivos.
El conflicto entre el Sindicato de Neumáticos y las empresas del sector está llevando las cosas de una reunión paritaria a una confrontación respecto a en qué sociedad vivir. En realidad, para la conducción del sindicato el capitalismo debiera ser abolido. Y esa es la base de un conflicto llevado hasta las últimas instancias.
Más allá de si el reclamo por incremento salarial sea justo o desproporcionado, está claro que el acompañamiento de organizaciones piqueteras a dicho reclamo más los que corresponden a la demanda de más planes sociales muestran un intento de sectores de la izquierda de cuestionar no solo al Gobierno y al sindicalismo tradicional sino también disputarle a Milei el voto antisistema.
El reportaje que le realizó Fantino a Del Caño y Solano en Animales sueltos expresó esto cabalmente. Otro conflicto es el de la toma de colegios por parte de estudiantes secundarios, que expresa no solo la típica rebelión juvenil sino la búsqueda por un sector del kirchnerismo de que la juventud vuelva a fijarse en ellos en lugar de mirar a la izquierda o a Milei. Se podrían decir muchas cosas de lo que sucede en las escuelas de la Capital. Hay problemas de infraestructura en las escuelas, pero también hay pérdida de días de clase que incluye colegios primarios. El tema de las pasantías es una buena idea que seguramente debiera ser mejorada en su implementación. Las quejas porque son gratuitas finalmente cuestionaría también las prácticas gratuitas de los estudiantes de Medicina o Psicología. Seguramente una mejor predisposición al diálogo de ambas partes podría resolver las cosas.
Claro que las tomas de colegios ayudan a la idea de descontrol generalizado y golpean al gobierno nacional aunque se quiera golpear a Larreta. Además, parte de los reclamos estudiantiles incluyen el acuerdo con el FMI como responsable de la falta presupuestaria. ¿Es un indicador de que un sector del kirchnerismo comienza a cuestionar la orientación económica?
Los sucesos en el sur con la toma de Villa Mascardi por parte de quienes se revindican dueños de esas tierras más representantes del Sindicato de Camioneros dando una golpiza al dueño de un establecimiento deben ser una alerta sobre violencia política.
La calle está tomada pero la política también se mueve. La presión de los gobernadores para suspender las PASO tiene un doble sentido. Por una parte, golpear sobre la interna opositora y complicarle el modo de dirimir sus candidaturas. Por la otra, de mantenerse la fecha de octubre para la primera vuelta, alargaría los tiempos que necesita Massa para tratar de bajar la inflación y generar un mejor clima económico. Si como en 2019 las candidaturas comenzaran a definirse en mayo, los tiempos políticos se acortan. Si se alargan, quizás el tiempo podría ser un aliado del oficialismo para domar el potro inflacionario. Si no logra hacerlo, ninguna fecha le servirá.
Un segundo aspecto refiere a que, aunque el oficialismo pierda las elecciones, es en primera vuelta donde se juegan los senadores y diputados, por eso necesita llegar fortalecido a dicha instancia, buscando no perder la mayoría en la Cámara de Senadores y quedar fuerte en la de Diputados. Pero la presión de los gobernadores no refiere solo a las PASO, incluye el tomar protagonismo en el escenario político y comenzar a cuestionar que los candidatos provengan del AMBA.
Todo lo que sucede en nuestro país se mueve en un contexto de cambios que se acelerarán el próximo año en un sentido incierto. Lula seguramente será gobierno en Brasil y eso también podría darle al Gobierno un pulmotor político y económico. EE.UU. marcha hacia una recesión que puede golpear al mundo.
El resultado de las elecciones de medio término fortalecerá o debilitará a Biden, Trump sigue al acecho y no hay que dejar de mirar el avance de las derechas nacionalistas y fascistas en Europa.