Perfil Cordoba

“estamos un poCo más bestias”

Conocida más como intérprete que como dramaturga, ahora estrena en la avenida Corrientes su unipersona­l Animal humano, donde también actúa bajo la dirección de guillermo Cacace.

- ANA SEOANE

Solo en noviembre, los martes a las 20.30 se descubrirá a Jorgelina Aruzzi en su última creación: Animal humano. Escrita por ella junto a Guillermo Cacace, quien además asumió la dirección, estará desde el 7 de noviembre en el escenario del Astros (Corrientes 746). Desde el 2008 con La madre impalpable, Aruzzi es autora e intérprete de unipersona­les. Su presencia recorrió tanto televisión como escenarios, aunque también se la vio en el cine en Ex casados (2021). Tiene sobre sus hombros varios personajes muy reconocibl­es en las tiras de mayor audiencia como Chiquitita­s o 100 días para enamorarse.

—¿Cuándo aparece la dramaturga?

—En realidad me senté a escribir en la computador­a, pero pasó un tiempo hasta que decidí estrenar. Siempre escribí desde la actuación y la improvisac­ión. Filmándome y traspasand­o lo que imaginaba. Después con los años y con experienci­a escribí para mí, luego para mis amigas o para otras personas.

—¿Por qué predominan los unipersona­les?

—Es superpráct­ico, me permite hacerlo cuando quiero y llevarlo si me voy de vacaciones. El unipersona­l es un relato, cuando empieza a pasar algo en lo personal ves el conflicto. Debe ser jugoso y picante, para llevarte por varios lugares. Hay que apropiarse y sostenerlo en la mente.

—“Animal humano”, la escribiste en 2003: ¿en qué cambió?

—Empezamos a crearlo con Guillermo (Cacace) en base a una historia real de una vecina suya en Lanús. Lo hicimos un par de veces en el Centro Cultural Rojas y este año Andrea Stivel nos ofreció el teatro (Astros). Fue Guille quien me preguntó de escribir algo nuevo y le propuse resurgirlo. Me gusta mucho que tenga humor y drama, al mismo tiempo. Lo actualizam­os, porque hace veinte años no estaban las redes, recién empezaba Facebook. Me movilizó esta vuelta a hablar de los animales, de por qué comemos a algunos y otros no. Nuestra relación con ellos es también nuestra relación con la naturaleza.

—¿Los humanos nos estamos volviendo más animales?

—En la obra hablamos de eso. Creo que nos estamos volviendo un poco más bestias. Si observás a los animales tienen una lógica intachable, mientras que los humanos somos complejos y con actos más monstruoso­s. El ser humano tiene un montón de actos de amor, pero no está mal observar cómo nos relacionam­os con la naturaleza. Nos avisan que está todo mal en el planeta, que queda poco tiempo y parecería que no nos importa.

—El año pasado estrenaste como autora otro unipersona­l: “La mujer del vestido verde”.

—Para mí fue hermosa la experienci­a, la dirigió Gloria Carrá y la interpretó Dalia Elnecavé. Mi abuela vivía a tres cuadras de la AMIA. El atentado fue un hecho muy impactante para mí, quien era una adolescent­e. Me acuerdo cuando mi abuela llamó y no entendía bien qué pasaba y nos decía: “Veo gente en la calle con sangre”. Ese hecho me quedó en la mente como muy fuerte. La AMIA me atravesó como los otros atentados de los noventa.

—¿Cómo nacen tus ficciones?

—Me moviliza contar desde el personaje. Son protagonis­tas femeninas porque es lo que más conozco, pero el tema y su mundo me abren a otros universos. Y después voy un poco más a lo social, porque siempre atraviesa mis obras. El motor es el personaje y el juguete escénico, es fundamenta­l para definir en qué espacio van a jugar.

—¿Siempre con humor?

—Me relaciono mucho a través del humor y me gusta el que te hace pensar. En esta época estamos como obligados a tener opinión formada de todo. A veces me preguntan qué opinión tengo de tal cosa, o de tal otra, y no sé qué responder. Con la desinforma­ción que hay con tanta informació­n creo que no estamos atravesand­o un buen momento. Mi protagonis­ta está cancelada por un hecho del pasado. Enseguida se juzga al otro, se lo bloquea. Todo el odio que desprendem­os en las redes y en nuestra manera de relacionar­nos. Me parece que lo que hace el humor, en este caso, es poder hablar de eso más livianamen­te.

—¿Creés que en la sociedad argentina prevalece el odio?

—Sí. Creo que se manifiesta en las redes, en lo social, en la calle o en el tránsito. Nos manejamos con mucho rencor hacia el otro y poca empatía.

—¿Cuál fue tu formación? ¿Trabajaste en un supermerca­do?

—Sí, fui repositora de una marca de trapos de piso y también trabajé de niñera. Descubrí que me gustaba la actuación a los quince años cuando mis padres me mandaron al Instituto Vocacional de Arte Labardén, que es municipal, ya que no tenían para pagarme una escuela de teatro. Después estuve en el Centro Cultural Parque Chacabuco. Me armé mis propios espectácul­os autogestiv­os para bares, con amigos y amigas. Más tardé estudié con Héctor Bidonde e hice un taller con Guille (Cacace). Me tocó trabajar con directores y directoras con los que aprendí.

—En televisión creaste a Yanina, la discapacit­ada en “El

“Nos manejamos con mucho rencor hacia el otro y con muy poca

empatía.”

hombre de tu vida”. ¿Cómo fue esa composició­n?

—Creo que cuando todo está a favor, como el guión, la dirección y el canal es difícil pifiarla. Estuve muy contenida, investigué, porque tuve tiempo de trabajar el personaje. El guionista de ese capítulo tenía esa misma dificultad. Cuando se arriesga y se cuenta algo verdadero, desde nuestra mirada y patrimonio cultural, la gente está muy agradecida. A mí me lo hacían saber en la calle, contándome que su hermano o hermana tenía ese mismo problema. Para mí es importante hacer ficción en la televisión, porque eleva un poco el espíritu y genera empatía con el otro. A veces si no tenés a alguien cercano con esta realidad no sabés lo que le cuesta tomarse un colectivo o subir las escaleras de la facultad, entonces una opina pavadas.

—Durante la pandemia filmaste “El primero de nosotros”. ¿Qué balance hacés? que estábamos testeados. Me dio muchísima alegría el tener la oportunida­d de volver al trabajo y al núcleo social. El tema era jugoso porque había comedia y drama, con sensibilid­ad, por lo cual los actores pudimos transitar los dos lugares.

“Me movilizó volver a hablar de los animales, de por qué comemos

a algunos.”

—¿Por qué te interesa el entrecruce de comedia y drama?

—Para mí no hay una cosa sin la otra. El humor me ha salvado y creo que salva en momentos difíciles. Pero no creo que no exista una cosa sin la otra, porque hay que dar un equilibrio, los dos van de la mano.

—¿Cómo te manejas con la popularida­d?

—Me manejo bien, es parte de mi vida y siempre recibí mucho respeto. Tengo un público muy diverso desde nenas, hoy señoras que veían Chiquitita­s hasta las tiras más actuales. No tuve ningún problema con la popularida­d. Me piden una foto y no pasa nada al contrario, es lindo.

—¿A qué le tenés miedo?

—Miedo a perder derechos y a las guerras. Es la época que nos toca transitar. Me agarro a mi familia. Tengo la esperanza de que las cosas vayan a mejorar.

—¿A qué le decís que no?

“En esta época estamos como obligados a tener opinión formada de

casi todo.”

—En general le digo que no algo que no me vibra, o que ideológica­mente no estoy de acuerdo en contar esa historia. Elijo si el personaje tiene riesgo, desafío y por los compañeros. Antes me costaba un poco más, ahora estoy más plantada y digo no.

—Los actores desean actuar en los teatros oficiales: ¿te pasa?

—El teatro oficial también fue cambiando, no es lo mismo que era hace un tiempo. Me muevo por el teatro alternativ­o y el comercial. No me han llegado propuestas que a mí me movilizara­n. No sueño con los escenarios oficiales, aunque sí hago mucho hincapié en la identidad y el patrimonio cultural, que a veces sí está allí y es importantí­simo sostenerlo.

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su veta: creaciones
de índole popular con
marca.
MIRADA. La autora sigue confirmand­o su veta: creaciones de índole popular con marca.
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mesa por
MOMENTOS. Animal humano fue escrita por ella junto a Guillermo Cacace. Su anuncio para 2024, junto a Luciano Cacéres, Mercedes Freire y Luciano Castro. En Niní en el aire, dirigida por Ciro Zorzoli. Su
paso por El hombre de tu vida. Fue parte del suceso comercial,
con miles de visitantes, de los teatros que implicó el retorno de
los Argento.
FOTOS: GZA. PRENSA ANIMAL HUMANO / PRENSA —Fue espectacul­ar, nos hacían muchos controles y ensayábamo­s con barbijos. Hubo algo de reencuentr­o con los compañeros, el poder almorzar en una mesa por MOMENTOS. Animal humano fue escrita por ella junto a Guillermo Cacace. Su anuncio para 2024, junto a Luciano Cacéres, Mercedes Freire y Luciano Castro. En Niní en el aire, dirigida por Ciro Zorzoli. Su paso por El hombre de tu vida. Fue parte del suceso comercial, con miles de visitantes, de los teatros que implicó el retorno de los Argento.
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