Contrarreloj, milei termina de delinear el DnU y define las iniciativas que envía al congreso
El Presidente quiere avanzar en una desregulación total de la economía y el Estado mediante dos planos: por una serie de decretos de necesidad y urgencia y por un conjunto de proyectos que
Javier Milei ya hizo saber a propios y ajenos que no va a perder tiempo y que, con motosierra en mano, aquella que escondió durante la campaña electoral hacia el ballottage, pretende desregular totalmente el Estado. Y bajo dos vías: mediante un paquete de leyes y una serie de decretos de necesidad y urgencia, que están analizados bajo lupa por Rodolfo Barra, el procurador del Tesoro, clave en las privatizaciones menemistas. Los medios públicos, en la mira libertaria.
Cerca del Presidente y de varios de sus ministros, coinciden ante PERFIL que hasta el momento la gestión de La Libertad Avanza no puso en marcha un plan económico, solo aparecieron medidas de “estabilización” que fueron comunicadas por el líder de Hacienda, Luis Caputo, y que la agenda de la semana que comienza estará teñida efectivamente por disposiciones que, desde la visión de Milei, permitirán el crecimiento de la economía. Para el jefe de Estado, no hay camino alternativo: se deben quitar regulaciones estatales a toda costa, es el corazón de su proyecto, y está convencido de firmar decretos.
Con este contexto, los medios públicos, como Radio Nacional, Télam, la TV Pública y DeportTV, entre otros, aparecen como los primeros candidatos a ser cortados por la motosierra libertaria, como las Sociedades del Estado, que pasarán a ser Sociedades Anónimas para facilitar la venta. También, Milei apuesta a variar la Ley de Alquileres (un tema que fue parte de sus actividades proselitistas), modificar por decreto la ley de movilidad jubilatoria (Caputo adelantó que quiere que los aumentos sean dispuestos por el Poder Ejecutivo), el régimen de obras sociales y normativas de empleo y comunicación audiovisual. Si efectivamente Milei avanza en los últimos puntos, puede llegar a tener problemas con la CGT, cuyos principales armadores siguen de cerca movimientos del “León” y, por lo bajo, subrayan ante este medio que el límite está dado por requieren de amplios consensos. Los medios públicos, la Ley de Alquileres y los controles de precios pasarán a mejor vida. Rodolfo Barra, el procurador del Tesoro, y clave en las privatizaciones de la era Carlos Menem, trabaja a su lado, revisando la letra chica de las disposiciones para que no choquen con la Constitución. El rol de Federico Sturzenegger en el armado del plan. la aparición en escena de una reforma laboral “agresiva” y la desaparición de asistencia estatal para el jaqueado sistema de salud que está en manos de gremios. Si eso ocurre, la central Azopardo dejará de lado los comunicados y analizará acciones en las calles.
Por otro lado, y a todo ritmo, el Gobierno quiere darles punto final a la Ley de Abastecimiento, la Ley de Góndolas, los fideicomisos de trigo y aceite, y a todos los programas que controlen precios. Como reconocen fuentes libertarias, hay cuestiones que podrían pasar por el Congreso gracias a un consenso y lo antes posible, mientras que “las más duras” directamente pasarán por DNU. Ese fue un tema que se tocó en las últimas dos reuniones de gabinete, que fueron presenciadas por Victoria Villarruel, la titular del Senado, y Martín Menem, presidente de la Cámara de Diputados, quienes ya poseen la tarea de explorar acuerdos. No estarán solos en dicha misión porque este martes Guillermo Francos, ministro del Interior, hablará del
milei apuesta a que esta semana la agenda pase por el paquete de normas
que lanzará el martes medirán el termómetro de los gobernadores
para saber si apoyan los recortes
tema en compañía de Milei con los gobernadores y tanteará posiciones entre los mandatarios. Todavía, los líderes de los ejecutivos provinciales no confirmaron presencia.
Hay otro tema que figura en la cabeza del Presidente y está relacionado a la reforma fiscal. Desde que asumió, dijo que quiere instrumentar cambios profundos y, en un borrador que dispone, figura la reposición del Impuesto a las Ganancias, con ajuste de alícuotas nominales una vez al año, una extensión de Bienes Personales por cinco años más, y generalizar retenciones a las exportaciones a todos los productos.
El libertario, que pasa sus horas en el hotel Libertador, no trabaja solo en todos estos cambios. A su lado aparece Barra, el procurador del Tesoro, un hombre clave de la gestión Carlos Menem al momento de las privatizaciones, quien analiza qué decretos pueden chocar con lo que marca la Constitución. Cerca del mandatario niegan que también participe otro exfuncionario menemista privatizador, Roberto Dromi, aunque hay voces que afirman que sí lo hace. Mientras que Federico Sturzenegger, extitular del Banco
Central de la gestión Mauricio Macri, es el ideólogo de toda la trama de reformas económicas, que trabajó en los últimos meses y consta de miles de hojas. Incluso, apareció en encuentros del elenco gubernamental para dar objetivos y alcances de un plan que necesita del visto bueno del Parlamento, pero que, sin lugar a dudas, tendrá pulso a través de las firmas de Milei.