Se multiplica la conflictividad social, pero el Gobierno se aferra al ajuste
Los centrales obreras advirtieron que se están generando las condiciones para un nuevo paro general. Mientras tanto, las organizaciones sociales ya dialogan para realizar acciones conjuntas en los próximos días ante la falta de distribución de alimentos. En la comunidad educativa están en alerta: no solo los gremios, sino también padres y alumnos por el posible no comienzo de clases. Crece la pelea con los gobernadores por el recorte de fondos, mientras la Corte debe fallar por el DNU.
El líder libertario también logró aglutinar en su contra a las distintas líneas de las organizaciones sociales, que durante la gestión de Alberto Fernández permanecieron separadas. Ahora, tanto Barrios de Pie, como el Movimiento Evita y la Unidad Piquetera apuestan a encarar acciones en conjunto y siguen en charlas, con la posibilidad de acampar en avenida 9 de Julio latente. “No podemos descartar ninguna posibilidad ante semejante nivel de ajuste”, dicen desde las agrupaciones.
Con todo, la administración de LLA no parece dispuesta a ganar en musculatura política. En poco tiempo logró poner como adversarios a los mandatarios provinciales que estaban incluso dispuestos colaborar con la gobernabilidad y a otorgarle a Milei herramientas legislativas.
Sin embargo, ya son muchas las provincias que han recurrido a la Corte Suprema para iniciar reclamos. La Rioja, Santiago del Estero, Chubut y La Pampa se presentaron ante el Máximo Tribunal. Reclaman fondos recortados que ponen en jaque sus administraciones. Neuquén y Río Negro presentaron una intimación reivindicando su poder concedente sobre represas y hasta amenazaron con “cerrar el grifo” de la energía.
Milei se encomienda al ajuste ejecutado por Luis Caputo, quien en los últimos días celebró el superávit financiero que arrojó enero, tal como había anticipado PERFIL. El ministro-trader es monitoreado de cerca por Nicolás Posse y el enigmático Federico Sturzenegger a quien se lo vio en los pasillos de la Casa Rosada, pero que elige no hablar con la prensa.
Un dato del que casi no se habla: la caída de la ley “Bases” permite prolongar la actual fórmula jubilatoria que no ajusta por inflación y permite licuar gastos. La falta de contención para los adultos mayores también será un punto conflictivo.
En ese escenario, los meses de marzo y abril asoman como un campo minado para el Gobierno de Milei que se aferra a los números del ajuste (motosierra y licuadora no se negocian) y evita alternativas para paliar la caída de ingresos.
se da en medio de las tensiones con las organizaciones sociales. Su salida fue casi inmediatamente posterior al encuentro que Milei tuvo con Francisco en el Vaticano, el pasado lunes. En la comitiva estuvo ni más ni menos Pettovello. El Santo Padre le pidió al Presidente que preste especial atención en los niños y en los jubilados.
Esta semana, la Iglesia volvió a pedir por el envío de alimentos. El Obispo Carlos Tissera, titular de Cáritas dijo que “primero está la comida de la gente”.
Milei alertó que marzo y abril serán los meses más difíciles. El viernes, Pettovello anunció el aumento de la ayuda escolar por hijo, que aumentó un 311%, pasando de $ 17 mil a $ 70 mil. En concreto, la asistencia llegará a 7,3 millones de niños.