Llaryora atraviesa su momento más complicado desde que es gobernador
Calificados voceros aseguraron que no hay ningún tipo de contacto con Milei ni con ninguno de sus ministros. Los serios problemas de inseguridad, las
Definitivamente, el inesperado encontronazo del gobernador de Chubut, Ignacio Torres, con el presidente Javier Milei puso al mapa político en un lugar dominado por la tensión y la angustia. Eso pegó fuerte en todo el país, más allá de que los gobernadores patagónicos quisieran morigerar la situación.
Lejos de querer dialogar, Milei perdió por completo la compostura que le debe dar su cargo y embistió como quien intenta una venganza. Ese salto a la yugular del chubutense preocupó mucho en Córdoba, donde el gobernador Martín Llaryora viene de protagonizar feas discusiones con el jefe de la Casa Rosada.
Más allá de las conjeturas locales, lo cierto es que la bravura de sus acciones –cerca de la irracionalidad en algunos casos– tienen en Córdoba el respaldo popular. Eso también hace que el gobernador trate de ‘reperfilar’ su estrategia.
En El Panal, calificados voceros del llaryorismo reconocieron que “en estos días no existe ningún tipo de contacto” con Milei ni con sus ministros. Y luego exclaman que Córdoba “hizo el ajuste en serio”, lo que le permite tener herramientas para darle contención social a las famigrano idas y vueltas por el horario del clásico, el temporal y la demora en el envío de los fondos por la Caja de Jubilaciones configuran un escenario más que
lias. Este es un punto de roce permanente con la oposición provincial que le achaca al mandatario provincial no haber eliminado gastos innecesarios (aducen que Córdoba tiene 25 ministerios, sumando las agencias).
Indican las fuentes que por la crisis económica “16.000 chicos dejaron la escuela privada y recalaron en colegios del Estado y obviamente la provincia los recibirá y les dará respuestas”. “Eso porque hicimos el ajuste y estamos en condiciones de dar contención social”, recalcan mientras desde Juntos por el Cambio redoblan las críticas a Llaryora.
Días complicados. El gobierno complicado. El chubutense Ignacio Torres tensó más la cuerda y hace cada vez más frontal el enfrentamiento de gobernadores con el Presidente.
provincial tiene en estas semanas su momento más complicado, con muchos frentes abiertos que le duelen y preocupan y que en muchos casos están más allá de la presión que metió Milei.
El grave problema es la inseguridad. Oficialmente, el ministro Juan Pablo Quinteros aseguró que Córdoba iba a ser territorio hostil para los narcotraficantes y sin embargo, en Villa El Nailon, a 15 minutos del centro de la capital, estalló un conflicto entre bandas que dejó un muerto como saldo y que en el fondo tiene el mercado de estupefacientes como uno de los ejes de los diferendos. Hay muchas declaraciones
y muchas fotos, pero no se ven resultados concretos. Además, en esta interna quedaron involucradas algunas hinchadas de los clubes más grandes de Córdoba.
Es cierto que la gestión lleva menos de tres meses y que es un problema estructural que viene de años y al que las administraciones de José Manuel de la Sota y Juan Schiaretti nunca le encontraron la vuelta. Sólo que pareciera que hay que salir de lo marketinero porque la gente necesita otra cosa.
Algunas voces en el Centro Cívico levantaron la voz cuando se enteraron del lío que se armó por el horario del clásico de fútbol entre Bely Talleres y que tuvo como uno de los protagonistas al ministro, quien protestó porque coincidía con el súper baile de la Mona. En principio el partido estaba programado para las 22 y se superponía con el show del legendario ídolo. Gracias a una gestión del presidente de Instituto, Juan Manuel Cavagliatto, ante el presidente de AFA, Claudio ‘Chiqui’ Tapia, el horario se cambió y las autoridades se sintieron aliviadas.
En esos días, Llaryora sufrió la interrupción del subsidio al transporte, lo que lo llevó a duplicar, y más, el precio del boleto interurbano y urbano. Hoy trasladarse para ir a trabajar es una complicación importante. De todos modos, la provincia ratificó que seguirá instrumentando el boleto educativo, así como otros que benefician a obreros y jubilados, entre otros.
Igual, esto también le pega a Llaryora. Nada es gratis cuando deben tomarse medidas antipáticas a las que la gente considera exageradas. Y a esto debe sumarse que Milei podó el incentivo docente y que sigue sin mandar las partidas para la Caja de Jubilaciones ni tampoco achicar la deuda con el organismo previsional, que no fue transferido.
Avanzar para reclamar por la deuda que mantiene el poder central con la Caja de Jubilaciones de Córdoba fue una de las recomendaciones de Schiaretti, quien ve a este camino como más factible debido a que ya existe jurisprudencia de la Corte que favorece a Córdoba.
El meteoro. En un contexto de pálidas y de inconvenientes que se multiplican con el paso de los días, la frutilla de la torta se vio el pasado jueves con el violento y rápido temporal que desnudó todas las falencias de la capital provincial, gobernada durante los últimos cuatro años por el actual mandatario provincial. Anegamientos, bocas de tormentas tapadas, inundaciones, desbordes, calles que se convirtieron en ríos… Podría decirse que se trató de un fenómeno inesperado, lo cual es cierto en parte. Pero llegó el momento de realizar obras de infraestructura que puedan contener la situación. Estos fenómenos se repiten cada año con mayor frecuencia y si no se toma el toro por las astas habrá que lamentar hechos desagradables. De milagro no hubo víctimas fatales.
Pero todo pasó a segundo plano tras la irrupción del chubutense ‘Nacho’ Torres en la escena nacional, con su amenaza de no entregar petróleo si no le alivian la situación. También dijo el gobernador patagónico que un día antes de su anuncio, se reunió con Mauricio Macri y le contó su plan. La respuesta fue un pulgar para arriba, según mentan en el PRO.
El expresidente estaría muy molesto con Milei porque de buenas a primeras le bajó la persiana y puso en stand by la alianza de La Libertad Avanza con el PRO. ¿Todo tiene que ver con todo?