HONGOS silvestres, comestibles y de cultivo

Sin hongos no habría pan, ni cerveza, ni vino. Incluso, los hongos ayudan a que existan plantas y animales. Del reino fungi y sus múltiples virtudes medicinales, nutritivas y gastronómicas se ocupa el científico uruguayo Alejandro Sequeira en este libro,

Una revolución descomunal ocurre por segundo en el planeta. La llevan a cabo organismos muy pequeños, los más diminutos de la tierra. No son ni vegetales ni animales, habitan su propio mundo: el reino fungi y tienen sus propias reglas. Los hongos no hacen fotosíntesis como las plantas y tampoco se reproducen por semillas. La parte visible, la que comemos, es la fructificación. La que está bajo tierra o dentro del tronco de un árbol se alimenta de vegetales degradados, de hojarasca o madera, y extiende su cuerpo hasta que asoma en la superficie la seta, ese sombrerito que liberará las esporas con las que se reproduce. Toda la madera del mundo es descompuesta por los hongos y cada final tiene un principio como legado: los hongos saben hacer vida del árbol caído, Alejandro Sequeira en su libro Hongos silvestres, comestibles y de cultivo, editado por El Ateneo.

Además de fotógrafo y artista visual uruguayo, Alejandro es investigador formado en

Ciencias Biológicas y especialista en publicaciones de gastronomía –en 2023 ganó el premio The Best of the World en los Gourmand Awards por La Vigna Láctea. También uno de los fundadores de los “Fungizajes”, encuentros micológicos organizados en Montevideo

dice

y uno de los primeros micófilos en realizar micosenderos en su país.

Su obra es una guía completísima que da datos útiles y detalles curiosos sobre la cultura fungi. Y también destaca el valor gastronómico de los hongos, su umami, su versatilidad que permite prepararlos de distintas formas y según diferentes técnicas. Un plus no menor de su libro: la selección de recetas para preparar platos con hongos, desde ñoquis hasta helado.

Editó

A pesar de que

más de hay registradas

de hongos, 100 mil especies

existen entre se calcula que

Están los 800 mil y 5 millones.

alucinógenos comestibles, los

oruga de Alicia como el de la

se y los tóxicos. Sequeira

todos explaya sobre

ellos en su libro.