Lo que viene
En medio de la áspera interna del PJ local, una voz opositora del mismo palo lanzó un ácido comentario que marca el pulso de los pases de factura: “Marcelo Falo le está haciendo la campaña a De Rivas”. Los ‘heridos’ en el PJ ven una ventaja de que el actual funcionario municipal se quede con el sello de la coalición oficialista. Con ánimos caldeados recuerdan que Llaryora y Llamosas perdieron en Río Cuarto con el sello HUxC en las elecciones provinciales.
El Concejo Deliberante local será escenario en los próximos días de la división del oficialismo. La fractura en el PJ Río Cuarto quedará expuesta.
Ante el tablero electoral que definió la cúpula oficialista, el nazarismo moverá sus fichas generando que el llamosismo pierda la mayoría.
En lo que le resta de mandato (tres meses), el intendente deberá gobernar, de acuerdo a la coyuntura política, con una minoría en el cuerpo deliberativo. El nazarismo decidió abrirse y conformará un bloque de seis ediles: cuatro del palo y dos de otro partido.
El llamosismo puro quedará con seis integrantes y el radicalismo con siete. La mayoría pasará a manos de la UCR. “Se le va a complicar el Concejo en los últimos tres meses de gestión”, apuntó un peronista desencantado.
Según los sondeos que exhibe el nazarismo, el radical Gonzalo Parodi (UCR-JxC) “corre de atrás”, pero ante la división pegotista, podría escalar posiciones. Aparentemente, los intentos del PJ de fracturar al radicalismo no dieron sus frutos.
En la UCR activaron el operativo para contener a Gabriel Abrile, quien podría ser el candidato a primer concejal de la lista que encabece Parodi. Ahora bien, el juego pasaría por otro lado. Según se comenta, hay una promesa de ofrecimiento para que el médico sea postulante a diputado nacional en el próximo turno electoral. Ese sería el acuerdo.