Perfil (Domingo)

Inventó un robot para Marte y sueña con trabajar en la naSa

Marcos Bruno tiene 20 años, estudia ingeniería y su proyecto fue selecciona­do por the Mars Society para ser usado en el Planeta rojo.

- AFP

hay más hombres que dudan que padres que no lo son.

—Usted fue padre a los 50 años. ¿Es diferente la paternidad a esa edad que a los 30?

—El hombre que empieza una paternidad a los 50 es un hombre con mucho miedo, miedo a morirse. Sabe que tiene un acto de gran responsabi­lidad. El de 50 es un hombre preocupado pero, como está preocupado, también es un hombre más presente, que está más sólido económicam­ente y maduro para comprender que la reunión del jardín de infantes para hacer avioncitos de papel es un momento bárbaro, que no se cambia por nada. ¿Fomento que los hombres tengan hijos a los 50? No. Fomento la madurez para tener hijos. Cuando Marcos Bruno vio en internet la convocator­ia, puso manos a la obra. Envió el proyecto, lo aprobaron y en cinco meses dio a luz un robot que puede ser usado para instalar GPS....¡en Marte! “Mi sueño es trabajar en la NASA, quién te dice...”, cuenta a la AFP Marcos, que con 20 años cursa el tercer año de Ingeniería Industrial y planea especializ­arse en Mecatrónic­a en la Universida­d Nacional de Cuyo, en Mendoza.

Su proyecto fue selecciona­do entre cientos de todo el mundo por The Mars Society, una sociedad científica estadounid­ense que trabaja en cooperació­n con la NASA y cuyo objetivo es impulsar la exploració­n del Planeta Rojo.

“Hubo una convocator­ia en internet para presentar proyectos relacionad­os con Marte. Aplicamos y quedamos selecciona­dos. Lo construimo­s en cinco meses y terminamos de armarlo literalmen­te camino al aeropuerto rumbo a EE.UU.”, adonde viajó en abril pasado para someterlo a ensayos.

El diseño y construcci­ón fue en coautoría con Gabriel Ca- ballero (21 años), estudiante de Ingeniería en la Univesidad Tecnológic­a Nacional (UTN).

“Todavía no tiene nombre, lo estamos pensando”, dice aún sorprendid­o del éxito de su creación. El prototipo, un robot apenas más grande que una caja de zapatos con cua- tro ruedas, wi-fi y un sinfín de conectores, se asemeja a una pequeña patineta con un enjambre de cables, un sensor, un brazo que puede manejar instrument­al y una cámara.

“Está pensado para que sea capaz de clavar un GPS en el suelo de Marte. Varios GPS funcionand­o al mismo tiempo hacen un sistema de posicionam­iento global, pero el problema es que si uno se vuela o se rompe, el sistema entero se cae. El robot debe transporta­r un nuevo GPS e instalarlo para reparar todo el sistema”, explica.

El desafío fue pensar un robot capaz de soportar las condicione­s extremas de ese planeta, distante a unos 225 millones de kilómetros de la Tierra y que aún no fue pisado por el hombre. El robot fue probado durante dos semanas en una base en el desierto de Utah (Estados Unidos), un centro de ensayos de la NASA que simula las condicione­s del Planeta Rojo.

“Tu v e d o s semanas para ir realizando los ajustes, lo más difícil fue que clavara el GPS en el desierto, lo había probado en el patio de casa, pero allá falló. Por suerte pude solucionar­lo”, asegura.

El próximo paso es esperar que The Mars Society publique su informe. “Ojalá la sociedad científica me abra las puertas para una oportunida­d de trabajar con ellos”, se ilusiona.

Por otra parte, Marcos Bruno también participa de un proyecto de la Universida­d de Stanford, en Estados Unidos, que consiste en ofrecer microscopi­os que cuestan US$ 1 a países en vía de desarrollo o de escasos recursos.

 ??  ??
 ?? AFP ?? TRABAJO. Construyó el prototipo del robot en cinco meses.
AFP TRABAJO. Construyó el prototipo del robot en cinco meses.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina