Las dos caras
Pese a ocupar el horario y poseer similitudes con el envío más importante de la década kirchnerista, el flamante programa de la era Macri se desmarca por un mayor contenido periodístico y menor opinión acerca de los medios.
En mi gobierno no va a haber ni 6,7,8 ni 8,7,6”, prometió el actual presidente, Mauricio Macri, el 8 de febrero de 2015 en plena campaña electoral, ante la atenta mirada de Mirtha Legrand, en el programa que se emite por la pantalla de El Trece, señal del Grupo Clarín, hasta ese momento enemigo Nº 1 del gobierno de Cristina Kirchner. “No va a haber un programa que condicione la opinión de la gente”, reafirmaba el entonces jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
A más de un año y cinco meses de aquel juramento de libertad de expresión, y ahora con Macr i sentado en el sillón de Rivadavia, la TV Pública de Cambiemos despertó suspicacias al incluir en su pantalla el ciclo periodístico La quinta pata de la noticia, que ocupa el mismo horario (a las 21) que en su momento era propiedad del tan polémico envío producido por Diego Gvirtz durante la era kirchnerista. Las especulaciones a priori despertaban dudas sobre si se trataba de un símil 6,7,8 pero de color amarillo, con globos, periodistas chic, y culpando como un niño de todos los males políticos y económicos a la herencia recibida.
En los primeros ocho programas de La quinta pata de la noticia, conducido por Damián Glanz y Marcela Pagano, pasaron políticos de todos los colores e ideologías: tanto del Poder Ejecutivo Nacional como Marcos Peña, como de la oposición, con la presencia de Juan Manuel Abal Medina y Alberto Fernández. En el caso de 6,7,8, por su parte, el envío más emblemático por convocatoria de opositores en seis años al aire fue el de la invitación de Beatriz Sarlo. “Acá nos ofrecieron hacer periodismo y no otra cosa como militancia, propaganda u ‘opinianismo’, y lo estamos haciendo. Está claro que no es un programa oficialista de Macri. Tenemos libertad y podemos criticar a Macri, a quien sea, y preguntamos de todo”, afirma el conductor y periodista Glanz.
El nuevo ciclo carece de tapes de resumen con voz en off característico de la apertura de 6,7,8 que realizaba la producción de Diego Gvirtz, y tampoco existe una mesa redonda de periodistas que opinan de lo que acaba de emitirse. Una de las mayores diferencias con 6 ,7, 8 es que los columnistas Santiago Fioritti, Olivia Sohr, Diego Shurman, Cecilia Boufflet, Juan Agosto, Jesica Bossi, Ignacio Olivera Doll aportan información propia al debate. Podría decirse, en cierto sentido, que se parece más a un Intratables que a un 6,7,8. “No encuentro ningún punto de paralelismo con 6,7,8, nosotros no tenemos panelistas, sino columnistas que traen información, de sus fuentes, y muchas veces no coinciden entre sí, y eso hace rico al programa, se debate con información tocada de manera distinta. No tiene nada que ver con lo que estaba antes en el mismo horario del canal. No estamos para hablar bien o mal de nadie. No hay bajada de línea”, dice la joven conductora Pagano.
Cinthya García, ex panelis-
“Acá nos ofrecieron hacer periodismo y no militancia.” (Damián Glanz)
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