Perfil (Domingo)

El dólar marcó la agenda

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El cepo cambiario nació en la última etapa de la era kirchneris­ta, en noviembre de 2011, con la intención de detener la fuga de capitales, que ese año superó los US$ 26 mil millones, y que más que duplicaba lo registrado en 2010. Desde entonces, el gobierno fue sumando medidas como límites para tenencia, pago de importacio­nes y recargos a cuenta de AFIP para los consumos en el exterior. Los mecanismos derivaron en sucesivos repuntes del dólar paralelo, salida de depósitos en los bancos y una sostenida pérdida de reservas internacio­nales del Banco Central.

“El grito de ‘cambio, cambio’ de alguna manera se ha naturaliza­do en el paisaje, pero todo lo que se pueda hacer para combatirlo es bienvenido, no sólo hay evasión entre quienes alimentan el circuito, sino que es utilizado para delitos graves como la trata de personas y el tráfico, entre otros”, resaltaron desde una tradiciona­l casa de cambio. De fondo. Para los economista­s, lo que resta para combatir el blue representa una batalla mucho más profunda de la economía en negro, donde el dinero en efectivo tiene un rol central. “Todo avance hacia el uso de medios electrónic­os es un logro”, coincidier­on, y Rossi agregó que “de la misma manera que no hay que olvidar que un nuevo atraso cambiar io genera situacione­s que son daños colaterale­s, como la salida También durante su vigencia, en enero de 2014, el gobierno kirchnersi­sta devaluó un 23% la moneda, en medio de una inflación que iba en aumento. Apenas asumida la gestión de Mauricio Macri, una nueva devaluació­n de 42% se registró en la liberaliza­ción del cepo. de dólares por turismo, que hoy alcanza niveles similares a los de 2013”.

De momento, los controles en la City sobre el cumplimien­to de la Ley Penal Cambiaria se siguen realizando, si bien las normas que establecía­n el cepo han sido eliminadas en forma progresiva desde diciembre pasado.

En lo que se refiere al cambio de monedas de turismo, el Banco Central ultima detalles de una norma que permitirá a los hoteles comprar divisas y entregar pesos. Se tratará de un esquema en una sola vía ya que no estarán habilitado­s para vender divisas. Se tratará de una flexibiliz­ación de las exigencias para que los hoteles cuenten con una agencia de cambio, algo que hoy es posible pero que comprende numerosos requerimie­ntos.

La divisa ilegal existe desde hace décadas pero se disparó desde 2011, por el cepo

Casas de cambio abandonada­s y dólar unificado en la City del Microcentr­o.

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FOTOS: PABLO CUARTEROLO
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