Qué hacen en el mundo
conducción automática.
La subasta se llevará a cabo el próximo viernes 27 a través de la plataforma Nar váez Superbid (w w w. narvaezbid.com.ar). Según explicaron desde Sbase, para el lote de las dos “brujitas” el precio inicial será de $ 20.000. Mientras que la base para los Siemenes se fijó en los $ 12.000 por unidad.
De acuerdo a las condiciones del remate quien gane deberá correr con los gastos de traslado de los coches que se encuentran el taller Mariano Acosta, en el sur de la Ciudad. Se estima que el valor del traslado rondaría los $ 100.000 ya que se deberán utilizar grúas y camiones especiales para poder movilizarlos.
Si bien las centenarias unidades belgas están protegidos por la ley 4886, que las declaró patrimonio cultural en 2014, estas unidades fueron catalogadas como chatarra, tras ser retiradas de servicio en 2012 luego de que protagonizaran un accidente en cercanías de la estación Primera Junta. Y por eso pueden rematarse. Nuevos usos. En 2016 Sbase retiró de servicio 32 unidades Mitsubishi de la línea B que fueron reemplazadas por los CAF 6000 españoles. Del total, 28 fueron puestas a la venta mientras que las restantes se donaron al Metro de Tokio. De acuerdo con datos proporcionados por la empresa estatal, 19 unidades se vendieron al sector privado. Uno de los coches funciona actualmente como una hamburguesería en un centro comercial de la zona de Pilar, en el norte del gran Buenos Aires. Sin grandes modificaciones en su estructura le incorporaron mesas frente a los asientos que tenía el vagón.
Se supone que las unidades rematadas en esta oportunidad también tendrán un destino gastronómico, como por ejemplo un food truck, o se conviertan en un alojamiento turístico.
En 2015 Subterráneos propuso que algunos de los históricos vagones de madera de la línea A fueran utilizados en paseos nocturnos como una actividad turística. Sin embargo, la iniciativa nunca prosperó. En 2013, el ex ministro de Cultura porteño, Hernán Lombardi, había anunciado un proyecto de ley que apuntaba a transformar a los vagones belgas en bibliotecas que se instalarían en los parques y plazas porteños. Otro plan que tampoco se llevó a cabo. En Nueva York las autoridades decidieron arrojar 2.500 coches metálicos al mar para crear un arrecife artificial. Mientras que sólo 19 coches de distintas épocas fueron restaurados y son exhibidos en el Museo de Transporte. En París, a pesar del gran número de vagones en desuso conservados, muy pocos están a la vista del público. Los que visiten la ciudad de Londres, pueden ir al Museo del Transporte, donde se exhiben varios coches y locomotoras del Underground y del Metropolitan Railway. La empresa Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) recuperó y restauró en 1999 tres unidades de la serie original: M1, M6 y M8, con motivo de la celebración del 75° aniversario del Metro.