La cGt pone condiciones para aceptar los cambios laborales
Los sindicalistas quieren evitar que se reemplacen trabajadores por pasantes. Y piden tener control de policía por el trabajo informal.
La CGT marcó esta semana sus exigencias para acordar con el Gobierno los cambios que aspira a introducir el Ejecutivo en el mercado de trabajo. En la primera reunión formal del año, los gremialistas escucharon del ministro Jorge Triaca este jueves cuatro propuestas que apuntan a hacer crecer la “empleabilidad”. Para apoyarlas, la primera plana de la central demandó que se introduzcan controles de convenio e inspecciones sindicales para evitar lo que denominan el “modelo McDonald’s”.
El objetivo al que aspiran los gremios es contar con controles para evitar que las medidas que buscan crear nuevos empleos sean utilizadas para reemplazar “trabajadores por pasantes”, como sostienen que ocurre con el plan que presentó el Gobierno junto con la cadena de comidas rápidas. El primer punto que presentó el ministro de Trabajo en la reunión fue un esquema para convertir planes sociales en subsidios para el contrato en empleos de convenio colectivo. Los sindicatos están dispuestos a aceptar este esquema, siempre y cuando sea “para incrementar la masa de trabajadores, no para rajar cinco y tomar otros cinco a un menor costo”, explicó a PERFIL el secretario general Héctor Daer.
El segundo punto fue una propuesta para armar “estructuras de formación profesional que permitan prácticas en el trabajo”. El objetivo sería que estas sean iniciativas conjuntas de empresas, sindicatos y el Estado. La demanda cegetista es que sean incluidos en el convenio, para evitar que las prácticas se conviertan en un empleo precario encubierto.
El tercer punto es uno de los más delicados, el blanqueo laboral. Distintos asistentes a la reunión coincidieron en señalar que aún faltan definir detalles para este plan. Desde la CGT se advirtió que el límite estará puesto en que no se puedan vulnerar “derechos individuales” de los trabajadores. El temor es que al perdón impositivo se le sume un “blanqueo” que elimine derechos y posibles demandas laborales con una amplia “amnistía”.
Los cegetistas también quieren que las prácticas sean incluidas en los convenios
Además, la CGT planteó a Triaca que pretenden ampliar su participación en el control del trabajo informal. Desde hace tiempo, el gremialismo quiere contar con personal propio que verifique si existen situaciones de trabajo informal o en negro. Los planes del Gobierno para lograr la incorporación al mercado formal de un número importante de trabajadores se presenta como una oportunidad para renovar el pedido.
La última propuesta presentada por Triaca fue un incentivo para la incorporación de trabajadores en blanco. Sería un aporte de $ 2.000, como máximo por trabajador, para aliviar los costos de los contratos con una reducción de la carga tributaria que sería aportada por el Tesoro. Sobre este punto, el pedido fue nuevamente que todo se haga bajo el convenio colectivo, que no haya “contratos basura” y que todas las contrataciones sean “por tiempo indeterminado”.