Tragedias aéreas
Ayer se recordaron los 82 años de la muerte de Carlos Gardel y del letrista Alfredo Le Pera y los guitarristas que acompañaban al cantante como consecuencia del choque de dos aviones en Medellín. Justamente unos días después de ese accidente, el 15 de agosto, el popular actor y comentarista estadounidense Will Rogers viajó en un avión reconstruido con partes de otros, y que cayó a una laguna en Point Barrow, Alaska, donde perdió la vida. Es cierto que en 1935 la aviación estaba en sus inicios y los vuelos eran riesgosos y escasos. Los sucesivos adelantos técnicos popularizaron el transporte aéreo, si bien a veces circunstancias impredecibles ocasionaron accidentes con consecuencias fatales, y varios artistas, como Gardel y Rogers, tuvieron una muerte similar. Carole Lombard había terminado de filmar Ser o no ser en diciembre de 1941 y fue convocada el mes siguiente para promocionar los bonos de guerra. Viajando a Los Angeles en un Douglas DC-3 el avión se estrelló cerca de Las Vegas y falleció antes del estreno de su película. El productor Mike Todd el 22 de marzo de 1958 volaba en su avión privado Lodestar bimotor para promocionar su película La vuelta al mundo en ochenta días. La falla de un motor ocasionó su caída cerca de Grants, Nuevo México. Irónicamente al avión lo había bautizado Lucky Liz, por su es- posa Liz Taylor, y en él se mató también el guionista Art Cohn que estaba escribiendo su biografía. El ídolo mexicano Pedro Infante, un entusiasta de la aviación y también piloto, sobrevivió a dos accidentes, pero el tercero le costó la vida. Se estrelló en un viejo avión que había sido bombardero en Mérida, Yucatán, el 15 de abril de 1957, los cantantes Buddy Holly y Ritchie Valens se estrellaron en una avioneta el 3 de febrero de 1959 en Clear Lake, Iowa durante una tormenta de nieve. Audie Murphy, que había sido el actor combatiente más condecorado, murió el 28 de mayo de 1971 al estrellarse su avión en Roanoke cuando viajaba por negocios. Los primeros bailarines José Neglia y Norma Fontenla con otros colegas abordaron un avión hacia Trelew el 10 de octubre de 1971 para hacer una función y por una falla del motor el avión cayó en el Río de la Plata y no hubo sobrevivientes. Esa fecha, en homenaje a ellos, fue designada como Día de la Danza. El fallecimiento de tantos artistas en tragedias aéreas en cada época provocó sorpresa y desconsuelo entre sus admiradores, sobre todo por ocurrir en plena juventud.