VIDA PERSONAL Y VIDA CIUDADANA
Karina K articula su trabajo artístico, su mirada sobre la actualidad nacional y sus proyectos personales junto a Cynthia Manzi, con quien se unió en matrimonio hace dos años.
—¿Qué experimentás viviendo en el budismo, haciendo una obra que propicia el respeto a la vida humana y animal, en la Argentina del 2 x 1 para condenados por delitos de lesa humanidad?
—La forma de resistir a esa forma de pensamiento de quienes retrasan el desarrollo y la evolución de un país es justamente haciendo cultura. Como cuando indultaron a los militares, esto es un salto en el tiempo. No es una involución en un dictamen o un decreto, sino en el pensamiento. Me preocupa porque sucede en quienes están a la cabeza del país. Es una influencia negativa en el respeto de la decisión popular. Como dice el budismo (que es la religión o la filosofía más democrática), el soberano es el pueblo. Creo en el ser humano, en el empoderamiento del ser humano. Hay muros que se construyen en lo externo, sea el Muro de Berlín o el que quiere construir Trump. Y hay muros en el corazón, en la resistencia al diálogo, hay muros en el abuso de poder y en la intolerancia sobre la diversidad.
—¿En qué estado está el proyecto de adoptar un hijo, junto a tu esposa?
—Estamos pendientes… hicimos todos los trámites de adopción, está aceptada la carpeta. Estamos ya preparadas para la adopción, dentro de las posibilidades que nosotras sentimos tener, que son para niños de 0 a 8 años. Por ahora, nuestro hijo es el espectáculo.