Embargo de $ 6 millones para un jefe narco
El capo narco peruano de la villa 31, Alionzo Rutillo Ramos Mariños, más conocido como ‘Ruti’, fue procesado con prisión preventiva como organizador de una banda que comercializaba droga en en Retiro, pero además la Justicia le embargó sus bienes por seis millones de pesos.
El procesamiento fue dictado por el juez federal porteño Sergio Torres. En el dictamen el magistrado explicó que existen pruebas suficientes para concluir que ‘Ruti’ sería el “organizador de una cadena destinada al tráfico ilícito de sustancias estupefacientes en el que intervinieran más de tres personas y coautor del delito de acopio de armas de fuego, sus piezas y municiones, ambos en concurso real entre sí”.
Pa ra Tor res, ‘Rut i’ “forma parte de una asociación destinada primordialmente a ejecutar, en el interior e inmediaciones del asentamiento poblacional conocido como Villa 31 y Villa 31 bis de la ciudad de Buenos Aires actos relacionados con el tráfico ilícito de sustancias estupefacientes, incluyéndose entre los mismos la obtención, almacenamiento, fraccionamiento y distribución definitiva de distintas clases de narcóticos, como marihuana y cocaína (y sus derivados como el ‘paco’)”.
El juez federal lo acusó de “almacenar y usar permanente de todo tipo de armamento y municiones, y la ocurrencia de enfrentamientos y agresiones de todo tipo a terceros, con el claro objetivo de mantener la hegemonía territorial de la zona en la que se producía la mayor parte del emprendimiento criminal en cuestión”.
‘Ruti’ había sido detenido el 28 de septiembre del año pasado en la ciudad de Lima, donde vivía con su familia y supuestamente trabajaba en una zapater ía. Pese a que tenía un pedido de captura internacional el capo narco logró evadir a la Policía durante casi un año.
El viernes 7 de julio pasado fue extraditado para ser juzgado por los delitos cometidos en Argentina.
Alionzo Rutillo Ramos Mariños nació el 16 de agosto de 1964 en Lima. A los 20 años se integró al Comité Metropolitano de Sendero Luminoso, una de las células militarizadas más letales, aunque él siempre negó haber formado parte de ese grupo. En 2008 fue condenado a 18 años de prisión por la masacre del Bajo Flores, ocurrida en una procesión en 2005, y que dejó un saldo de cinco muertos”.