Irán acusa a trump de provocador y seguirá su plan de armamento
No sólo Corea del Norte plantea un desafío complejo a la gestión de relaciones exteriores del gobierno de Donald Trump. Irán anunció que seguirá con su plan balístico, pese a las sanciones del Parlamento estadounidense.
La escalada se produjo en momentos en que Teherán desarrolla ejercicios militares en el Golfo, lo que llevó a que ambos gobiernos cruzaran acusaciones. Bengalas. Teherán y Washington se acusaron mutuamente de proceder a maniobras provocadoras en el Golfo, que terminaron el viernes con el lanzamiento de bengalas de advertencia por parte de un helicóptero estadounidense.
Como respuesta, las fuerzas navales estadounidenses dijeron que actuaron en reacción a unos buques de los Guardianes de la Revolución que se aproximaban a gran velocidad a barcos norteamericanos, algo que Irán desmiente.
Según un comunicado de los Guardianes de la Revolución publicado en su página oficial, el incidente se produjo entre el portaaviones Nimitz y los navíos que lo acompañaban, por un lado, y fragatas iraníes equipadas con misiles, por otro. Versiones encontradas. En paralelo, según la Armada estadounidense, sus barcos realizaban una patrulla rutinaria cuando uno de sus helicópteros “observó varias embarcaciones de los Guardianes de la Revolución Islámica acercándose a las fuerzas navales estadounidenses a mucha velocidad”. Política. El vocero del ministerio de Relaciones Exteriores iraní, Bahram Ghasemi, dijo que Teherán condenaba las nuevas sanciones estadounidenses contra su programa de misiles. “Continuaremos con todas nuestras fuerzas con nuestro programa balístico”, declaró a la televisión estatal. “Nuestra política en el ámbito militar y balístico es muy clara y es un tema de asuntos internos. Los otros países no tienen el derecho de injerirse”, agregó, al tiempo que condenó las nuevas sanciones votadas por el Congreso y pendientes de la promulgación del presidente Donald Trump.
La ofensiva económica de Occidente no parece frenar el intento militar de uno de los países más antiestadounidenses de una región de por sí conflictiva. Para Estados Unidos y sus aliados europeos, el programa balístico “sigue siendo contradictorio con las resoluciones globales”.
Irán rechazó esas acusaciones, alegando que sus misiles no están “concebidos” para llevar cargas nucleares. Además, el ministro de Relaciones Exteriores iraní, Mohamad Javad Zarif, dijo que su país no construirá una bomba atómica.
fuerzas navales norteamericanas lanzaron bengalas de advertencia a buques iraníes