Qué crisis: Mercado libre reina en Venezuela
Además de todo, Venezuela se volvió un lugar difícil para los argentinos que intentan hacer negocios allí. Al grupo Techint le expropiaron Sidor en 2008. Enrique Pescarmona, al frente de la metalúrgica Impsa, quedó colgado de un pincel luego de atarse a proveer turbinas para la usina eléctrica de Tocoma. La cooperativa láctea Sancor hizo un buen acuerdo en un principio con precios más altos en sus exportaciones, pero terminó sin poder cobrar una deuda de US$ 37 millones y hoy trata de reestructurarse. La alimenticia Arcor, de hecho, no le vende al país caribeño ni un Bon o Bon.
Sin embargo, hay una multinacional argentina que no sólo sigue vigente en el país que gobierna cada vez más alejado de las formas democráticas Nicolás Maduro. Se trata de Merca- do Libre, el portal de comercio electrónico que lidera Marcos Galperín, cuyas ventas crecen al 20% internaual. Claro, ofrece enviar todo tipo de bienes a domicilio, en un lugar donde se ha vuelto muy difícil, aun teniendo el dinero, conseguir hasta los bienes más básicos. “La operación de Mercado Libre en Venezuela ha arrojado históricamente cifras saludables con un crecimiento sostenido interanual promedio que ronda el 20% en unidades”, asegura Sean Summers, vicepresidente de Mercado Libre. La empresa tiene oficinas comerciales en Caracas, además de un centro de fotografía y varios aliados para la distribución. Es un contexto difícil para las compañías. Hace poco, General Motors cerró su operación en ese país, y tiempo atrás, la multinacional de productos de limpieza y consumo masivo Cloros también debió dejar de producir. Sin embargo, Mercado Libre se mantiene, y crece: según cifras de Comscore, es el sitio web más visitado de Venezuela.
“Cada vez más pymes y emprendedores se suman a las posibilidades que ofrece el comercio electrónico”, añade Summers. Tendencia. Las categorías con mayor oferta y demanda en el sitio son .com.ve: accesorios para vehículos, electrónica, audio y video, hogar y muebles, ropa y zapatos. En julio, Mercado Libre llegó a los diarios en Venezuela por un hacker que escribió en el portal Libertad para el Pueblo de Venezuela. “Los inconvenientes de acceso a la plataforma fueron incidentes puntuales, debidamente atendidos, solventados satisfactoriamente, y que en ningún caso afectaron la seguridad de datos de nuestra comunidad de usuarios”, asegura el ejecutivo, que añade: “Venezuela es un mercado con muchas posibilidades y estamos enfocados en trabajar para aprovecharlas y ofrecer cada vez una mejor experiencia a nuestros usuarios”.
¿Y cómo es hacer negocios bajo un gobierno que, según la propia ex procuradora Luisa Ortega, tiene 3.500 presos políticos o más de 40 muertos en manifestaciones, además de expropiaciones de compañías? “Nos ocupamos de las variables que sí podemos controlar”, se limita a decir Summers.