Realidad e ideologías: el caso maldonado
La ciencia enseña que debemos privilegiar la explicaciones más sencillas y de sentido común sobre los delirios conspirativos. Todo el episodio con los mapuches en Chubut avala esa enseñanza.
Las posiciones que adoptan las personas cuando hablan de política tienen que ver más con sentimientos, y creencias subjetivas que con buscar la verdad. Cuando alguien dice algo, muchos aceptan o rechazan lo dicho por la simpatía o antipatía que sienten por quien habla y no porque averiguan si eso tiene que ver con la realidad. La idea de la neutralidad en estos temas lleva a confusiones que no se dan en el campo de la ciencia. Hay grupos reli- giosos que mantienen que la Tierra es plana, pero no cabría que cada vez que se publica una noticia sobre lo que hacen las naves espaciales se aclare “recordamos a los televidentes que todo esto puede ser falso, porque algunos creen que no existe el espacio exterior y somos neutrales en esa discusión”. Hay cosas que parecen reales y otras que sensatamente parecería que no lo son. Si usamos la Ley de la Navaja de Ockham, el principio básico del conocimiento científico, debemos privilegiar las explicaciones más sencillas y de sentido común sobre los delirios conspirativos.
Vale la pena preguntarnos ¿estamos o no en contra de la violencia?, ¿creemos o no que es necesario combatir el narcotráfico? Los dos temas están vinculados entre sí porque desde el derrumbe de la URSS desaparecieron otras fuentes de financiamiento de los grupos insurgentes y los que existen sólo pueden financiarse gracias al secuestro, la extorsión y el narcotráfico.
En pocos temas la pasión ideológica enredó las cosas más que en el caso Maldonado. Si se estudia el tema con documentos, hay cosas evidentes. El RAM es un grupo que está situado ideológicamente a medio camino entre Sendero Luminoso y el movimiento de Canudos de Antonio Conseheiro. En la entrevista que hizo Jorge Lanata a su máximo líder, está claro que su pensamiento no tiene nada que ver con tradiciones indígenas y es sólo la expresión rústica de un marxismo floger racista que no tiene que ver con la filosofía de Don Carlos. (https://www.youtube.com/ watch?v=hfpvABFGVwM) (https://www.youtube.com/ watch?v=nhALlBayJN4)
El Pu Lof de Cushamen es una base del RAM. Nació hace cinco años, cuando un grupo de personas invadió 1.200 hectáreas, en las que quienes ahora las habitan no trabajan la tierra, tienen pocos animales, seguramente usan el asentamiento para otras actividades. En el Pu Lof todo es secreto. Funciona como la caricatura de las zonas liberadas de Marquetalia o El Pato durante el apogeo de la guerrilla colombiana. No han tramitado un reconocimiento legal de las autoridades argentinas, a las que consideran enemigas. Por lo general sus guerreros visten de oscuro y usan máscaras. No se conoce su identidad, su nacionalidad, ni se sabe cuántos son. A un reportero le informaron que ocultaban toda información por razones de seguridad. El territorio está estrictamente controlado por