El Gobierno dice tener los votos y confía en convertir en ley la reforma previsional
El Gobierno cuenta para mañana con una base de 108 votos para convertir en ley la reforma previsional. Pero con eso no le alcanza. El anuncio de un bono para compensar una pérdida en el aumento que los jubilados tendrán en marzo incorporó –al menos así lo prometieron los gobernadores– a 25 de los 35 diputados nacionales que integran el interbloque Argentina Federal.
También podría contar con el respaldo del diputado Alfredo Olmedo y piensa que puede sumar al espacio Evolución de Martín Lousteau, aunque el diputado y ex embajador cuestionó el proyecto oficial y la decisión de compensar a los jubilados por decreto.
Si el aporte de las provincias es el prometido, el oficialismo superará, aunque por poco, los votos necesarios para convertir en ley la norma que vino del Senado. Serán unos 133 votos, cuatro más que lo que exige la mayoría simple. El anuncio del bono tranquilizó al peronismo, que respaldaría al oficialismo.
La Casa Rosada intentó sin suerte obtener la reforma el jueves pasado, pero la negativa de los peronistas no kirchneristas alteró sus planes. La sesión se cayó en medio de una discusión por la falta de quórum y una represión de las fuerzas de seguridad en las afueras del Congreso.
El oficialismo había confiado en que el pacto fiscal firmado por los gobernadores haría que los diputados de las provincias apoyaran el proyecto. Pero la creciente polé- mica mediática y la tensión en la calle hizo cambiar de opinión a los legisladores que de por sí no estaban convencidos de aprobar la iniciativa.
La salida que encontraron en la Casa Rosada con el bono compensador fue la justi- ficación de los mandatarios provinciales para garantizar, ahora sí, que mañana sus diputados bajarán y votarán la reforma.
El temor que algunos tienen en el macrismo es que una nueva protesta y un accionar violento de las fuerzas de seguridad (aunque esta vez no estarán las fuerzas federales, sino la Policía porteña) termine por desanimar a los diputados que se comprometieron a acompañar la iniciativa.
El voto cantado es el del kirchnerismo, que anticipó, tras el acuerdo de los gobernadores y el macrismo, que no dará quórum. Y que, si el Gobierno lo consigue, bajará a discutir y rechazar la reforma.
“El bono compensador es una burla”, le había dicho el viernes a PERFIL el jefe de la bancada, Agustín Rossi. Tampoco tiene respaldo del massismo, cuyos diputados fueron muy críticos de esta reforma y también de la compensación que propuso la Casa Rosada. Entienden que al ser por única vez no llega a cubrir la pérdida de poder adquisitivo que tendrán los jubilados. La izquierda tampoco dará quórum. Aunque si el oficialismo lo consigue con el apoyo del peronismo, bajará al igual que el Frente para la Victoria a discutir en el recinto. Se prevé una sesión larga.