Condenan a una mujer por tuit injurioso
Para Krawczyk, muchas herramientas de seguridad son difíciles de usar. sistemas, realmente seguros, todavía les falta desarrollo para simplificarlas”.
Pero, además, reconoce que hay un conflicto de intereses en grandes empresas como Facebook o Google. “Son organizaciones que ofrecen algunas herramientas para mejorar la privacidad, pero tampoco están demasiado interesadas en que se las use masivamente porque podrían afectar parte de sus negocios con la publicidad”.
Finalmente, Krawczyk recordó que también es necesario aumentar la educación informática. “Aunque sabemos de hackeos, hasta que no nos roban información personal no tomamos conciencia del problema. Por eso, sería bueno dar más educación sobre tecnología y nociones de programación desde los primeros años de la escuela, aunque no todos los estudiantes vayan a ser programadores. Es que hoy saber cómo utilizar y para qué sirve una PC ya casi es tan básico como leer y escribir”. La Justicia nacional de la Ciudad de Buenos Aires obligó, en un fallo sin precedentes, a una mujer a realizar 150 horas de tareas comunitarias por “calumniar e injuriar” a un hombre a través de Twitter. La decisión judicial se convirtió en un caso testigo para resolver los agravios entre particulares cuando son difundidos en medios masivos. La causa judicial se había iniciado el 3 de mayo del año pasado con la presentación de una querella por parte de Marcelo Frydlewski, quien se sintió “agraviado” a raíz de una serie de tuits publicados por Mónica Lang. El delito por calumnias e injurias está tipificado en los artículos 109 y 110 del Código Penal, pero nunca había sido aplicado en la Argentina para agravios vertidos en las redes sociales.