Entre 1992 y 2017 la Antártida perdió casi tres billones de toneladas de hielo
Durante veinte años el derretimiento de los hielos antárticos sumó agua a los océanos de todo el mundo y eso contribuyó a la elevación del nivel promedio global del mar en una cifra menor: apenas 7,6 milímetros. Pero ese aporte podría estar cambiando en forma severa, según un amplio informe que acaba de publicar la revista científica Nature y que suma cinco papers de diferentes y destacados investigadores: allí se concluye que en el último lustro el estado de la mayor masa de hielo de la Tierra empeoró y la Antártida perdió, en promedio, 600 millones de toneladas de hielo cada día entre 2012 y 2017, mientras que en años anteriores la pérdida era de “apenas” 134 millones de toneladas diarias.
Esos nuevos trabajos geológicos redoblan la alarma ambiental porque también se comprobó que la tasa anual de pérdida de hielo antártico está acelerando en forma significativa la altura media del mar: entre 1992 y hasta 2012 la pérdida de hielo contribuyó con 0,2 mm de altura por cada año. Pero en el último lustro el derretimiento creció en cerca del 300% y ahora ya aporta 0,6 mm, cada año, a la altura media del nivel del mar.
Lo peor del fenómeno descripto por los expertos en el último número de Nature es que los glaciólogos no saben si este fenómeno se estabilizará o si seguirá aumentando con el avance del calentamiento global.
El compor tamiento del hielo de la Antártida es clave para el futuro de la vida en la Tierra, ya que las masas de hielo de ese continente guardan suficiente agua que, en forma líquida, podría elevar el nivel del mar en nada menos que 58 metros.
Los investigadores concluyen que, si se adoptan medidas efectivas para contener el cambio climático y la temperatura media global no aumenta más de 0,9 grados, el deshielo de la Antártida solo hará subir el nivel medio de los mares unos 6 centímetros hasta 2070. Pero si no se adoptan estas medidas y se deja que la temperatura global aumente 2,9 grados Celsius, el nivel medio de los mares subirá al menos 27 centímetros hacia ese mismo año.
En el escenario actual semejante crecimiento de la altura oceánica hará que cuando los chicos que nacen hoy cumplan medio siglo de vida, zonas densamente pobladas como los deltas del río Mekong, el Mississipi o el Delta del Paraná, padezcan grandes inundaciones periódicas, lo que provocará daños y migraciones internas de cientos de millones de personas.